Delicioso spinat cremoso

La espinaca cremosa es la clásica opción que todos piensan cuando buscan el acompañamiento ideal y verde para el asado del domingo o un gratinado de papas. Su textura suave, el ligero sabor de espinaca y el toque de parmesano hacen que este platillo sea perfecto para consentirse. Hasta los peques no pueden decirle que no.

Desde chica este platillo me hacía feliz en casa de mi abuelita. Probé muchas formas distintas pero esta versión clásica sigue siendo la que más me gusta.

Sabrosos ingredientes

• Muskatnuss: si la rallas al momento le da un toque cálido y especial
• Sal y pimienta: usa siempre recién molida para resaltar los sabores
• Parmesano: ralla justo antes de usar para ese sabor salado y un poco a nuez
• Frischkäse: da cuerpo extra al plato y lo hace más lleno de sabor, entre más bueno el queso crema, mejor sale
• Sahne: para que todo sea súper cremoso, elige una con al menos 30% de grasa
• Espinaca fresca: debe ser joven, tierna y de color verde intenso, aunque con espinaca congelada también sale bien, solo exprímela bien
• Knoblauch: dale sabor usando el ajo fresco picado
• Zwiebel: tiene que estar bien picada para darle ese gusto especial
• Butter: le aporta ese sabor único y una sensación terciopelo, escoge mantequilla dulce buena

Fácil paso a paso

Sírvela directamente:

Lleva la espinaca en crema bien caliente a la mesa, queda increíble como acompañante tradicional y también encima de papas gratinadas o carnes.

Último toque:

Agrega parmesano, sazona con un poquito de sal, pimienta y if te gusta, un pellizco de nuez moscada. Remueve para lograr una mezcla suave y cremosa.

Ponlo cremoso:

Cuando la espinaca esté lista, suma la crema de leche y el queso crema. Cocina a fuego medio moviendo cada tanto hasta que todo se una y tome cuerpo. Tenle paciencia, ¡vale la pena!

Cocina la espinaca:

Coloca la espinaca en la sartén por tandas y revuelve hasta que reduzca su tamaño. Si usas congelada, asegúrate que no suelte mucha agua o se te va a aguadar la salsa.

Cocina los aromáticos:

Pon la cebolla picada en la mantequilla caliente y deja que se ponga suave (unos tres minutos), luego añade el ajo y déjalo oler rico. No dejes de mezclar para lograr ese fondo lleno de sabor.

Derrite la mantequilla:

Coloca la mantequilla en la sartén grande y deja que se derrita del todo en fuego medio hasta que haga un poco de espuma. Eso hace que suelte aún más sabor y queda como base del platillo.

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Cosas útiles a saber

• Tiene un montón de hierro y vitamina K, ideal para una comida rápida en días atareados
• Puedes dejarlo listo antes y calentar cuando quieras
• Queda increíble cambiando espinaca por acelga u otras hojas verdes

Lo que más me gusta es cuando el espinaca baby está fresca y empieza a irse achicando en la sartén. Ese aroma siempre me lleva a la cocina de mi abuela, donde después de un paseo afuera comíamos juntos un tazón grande de espinaca cremosa.

Guardar y recalentar sin dramas

Guarda lo que sobre tapado en la nevera y se conserva rico hasta por dos días. Para calentar de nuevo, ponlo a temperatura baja y anda removiendo, así no se corta la salsa y sigue cremosito.

Alternativas de ingredientes

Si no tienes queso crema, la crema ácida o hasta un poco de ricotta funcionan bien y queda igual de suave. Prefieres leche en vez de crema, te tomará un ratito más cocinarlo para que no se haga muy líquido.

Formas de acompañar

Este plato se lleva bien con huevos cocidos, puré de papas o un salmón a la plancha. Si buscas una comida vegetariana, sírvelo con pan crujiente o intégralo con pasta directamente para algo súper rico.

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Cuento de la cocina

La espinaca cremosa tiene historia larga en la comida casera alemana y austriaca. Primero se hacía cuando llegaba la primera espinaca fresca en primavera. Pero ahora a todos les gusta como platillo reconfortante junto a carnes, papas o verduritas.

Preguntas y respuestas sobre la receta

→ ¿Cómo lograr que el spinat quede súper cremoso?

Mezclando crema y queso crema juntos lográs una textura bien cremosa. El parmesano le levanta el sabor y une todo.

→ ¿Se puede hacer con espinaca congelada?

Claro, podés usar espinaca congelada. Eso sí, apretala bien para que no quede aguada la preparación.

→ ¿Qué condimentos van bien con el spinat cremoso?

Un poco de sal, algo de pimienta, nuez moscada y si querés un golpecito de ají le quedan de diez.

→ ¿Con qué queda más rico el spinat cremoso?

Va bárbaro como acompañante de carne dorada, pescado o papas al horno. Y también lo podés poner con fideos.

→ ¿Puedo usar una versión más liviana que la crema?

Podés usar leche o crema baja en grasa como sustituto. Queda más ligero, aunque no tan untuoso.