
Pollo jugoso con miel picante y macarrones cremosos es una combinación que nunca falla. El pollo se cubre con una salsa de miel y pimienta súper sabrosa que va perfecto con la suavidad y el toque de queso del mac and cheese hecho en casa. Siempre que lo sirvo, todos sonríen contentos y ya es mi opción favorita para días de fiesta.
La primera vez que lo llevé a una reunión, nadie se conformó con solo un plato y uno de los chicos ya me pedía la receta antes del postre.
Increíbles Ingredientes
- Pechugas de pollo sin hueso ni piel: Suaves y casi no tienen grasa Busca pechuga rosa y húmeda, sin partes babosas
- Ajo fresco: Da sabor intenso y aromático Prefiere dientes firmes, no verdes ni blando
- Miel pura: Da el toque dulce natural Si puedes, usa miel cruda o sin filtrar
- Pimienta negra molida al momento: Añade ese picor justo Muele en casa para más sabor
- Mantequilla sin sal: La salsa y el mac and cheese quedan ultra cremosos El color debe ser amarillo clarito, nunca aceitoso
- Pasta tipo coditos: Guarda todo el queso Rómpela y revisa que no tenga grietas
- Queso cheddar fuerte rallado: Derrite increíble y tiene mucho sabor Por sabor y textura, ralla tú mismo el queso
- Leche entera: Base suave y cremosa La leche debe estar fría y no oler feo
- Sal al gusto: Ajusta todos los sabores Mejor usa sal fina o de grano grueso para controlar más fácil
Pasos Súper Simples
- Servir y Disfrutar:
- Pon el pollo en cada plato, baña con la miel que queda caliente. Suma bastante mac and cheese y otra cucharada de salsa de queso para ponerte feliz.
- Salsa de Queso:
- En otro sartén, derrite dos cucharadas de mantequilla. Agrega un poco de harina y sigue mezclando hasta que esté bien liso, cerca de un minuto sin que se queme. Echa la leche despacio mientras sigues batiendo hasta que espese y burbujee. Quita del fuego y mezcla el queso cheddar rallado hasta que se funda y todo quede súper suave.
- Cocinar los Macarrones:
- Mientras el pollo está en el horno, hierve agua con sal en una olla grande. Cocina los coditos hasta que todavía estén un poquito firmes, suele ser unos ocho minutos. Cuélalos y guárdalos aparte para que no se pasen.
- Hornear con Glaseado:
- Pasa el pollo ya sazonado a una fuente para horno y échale la mitad del glaseado de miel encima. Llévalo al horno y deja que se haga durante unos veinticinco o treinta minutos. Sabes que está listo si al pincharlo no sale sangre y el termómetro marca unos sesenta y cinco grados Celsius.
- Preparar el Glaseado:
- Pon un cuarto de taza de mantequilla en una ollita a fuego medio. Cuando empiece a burbujear, pon el ajo picado y mezcla sin parar solo medio minuto, que huela rico pero no se ponga marrón. Agrega la miel y mezcla hasta que todo esté brillante y suave.
- Listar el Pollo:
- Seca bien las pechugas por los dos lados y sazona bastante con sal y pimienta recién molida. Así agarra más sabor y queda jugoso cuando lo hornees.

La miel es la estrella en este plato, su dulzura suave equilibra la potencia de la pimienta y le da ese brillo que todos elogian. Una vez mis hijos hicieron competencia a ver quién lograba el bocado más cargado de queso, terminamos muertos de risa.
Ideas Para Guardar y Preparar
Guarda lo que sobre tapado en la nevera por máximo tres días. Caliéntalo suave y agrégale un poquito de leche para que la salsa vuelva a estar cremosa. El pollo también queda genial frío en una ensalada.
Cambios y Alternativas
Si buscas más jugosidad prueba con muslos de pollo sin hueso o usa queso Monterey Jack para un sabor más suave. ¿Lo necesitas sin gluten? Elige pasta especial y espesa la salsa con maicena en vez de harina.

Con Qué Va Bien Este Plato
Ponle color con ensalada verde bien crujiente o brócoli al horno. Un chorrito de salsa picante o hierbas frescas arriba de la salsa de queso lo hacen ver y saber todavía mejor.
Una Pequeña Historia
El pollo picante con miel y pimienta se inspira mucho en la comida casera americana con ese toque especial sureño. El clásico mac and cheese es muy de comidas familiares y compartir mesa con gente que quieres.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué hago para que el pollo quede jugoso?
Sécalo con papel antes de hornear y sácalo apenas llegue a 74°C. Echa el glaseado antes y después para que no se reseque.
- → ¿Puedo usar muslos en vez de pechuga?
Claro, los muslos quedan aún más jugosos. Solo fíjate en el tiempo de horno y que alcancen 74°C por dentro para que estén seguros.
- → ¿Qué otros quesos pueden reemplazar el cheddar?
Prueba con gouda, Monterey Jack o alguno ahumado si quieres algo diferente. Mézclalos para una textura y sabor más intensos.
- → ¿Cómo evito que el macarrón se pase de cocción?
Cocínalos solo hasta que estén al dente y escurre rápido. Mézclalos con la salsa de queso para que sigan firmes y cremosos.
- → ¿Es posible cambiar el nivel de picante del glaseado?
Ponle la cantidad de pimienta negra que quieras, o echa un poco de chile si te gusta más fuerte. Si prefieres suave, pon menos o sáltate lo picante.
- → ¿Puedo adelantar alguna parte del plato?
El pollo con glaseado y la salsa de queso se pueden dejar listos antes. Solo caliente y arma todo al momento para que esté fresco y rico.