
Si buscas algo fácil y sabroso para esos antojos de comida rápida casera, esto es lo que necesitas. El pollo queda super suave, las verduras mantienen su crunch y la salsa se arma rapidísimo, hasta más rápido que pedir a domicilio. Además, todo lo puedes encontrar en el súper sin volverte loco buscando ingredientes raros.
En mi casa nunca nos ponemos de acuerdo con las órdenes para llevar pero esto siempre nos deja a todos contentos (y callados). Sabe más fresco que el de cualquier lugar y me encanta llenarlo de verduras.
Jugosos Ingredientes
- Pechuga de pollo: corta en tiras finas y procura que sea de color bonito, sin mucha humedad
- Sal kosher Morton: le da muy buen sabor, usa el grano más finito para que se distribuya bien
- Pimienta negra: da un toque apenas picante, recién molida es mucho mejor
- Ajo en polvo: añade sabor al pollo y te evitas tener que picar
- Salsa de soya: es la base del toque umami, busca la natural o baja en sodio
- Fécula de maíz: deja el pollo suavecito y con la textura de restaurante, asegúrate de que no tenga grumos
- Aceite de oliva: para dorar, usa un aceite ligero para que no robe protagonismo
- Zanahorias: crujientes y dulces, escoge las más firmes y de color fuerte
- Champiñones frescos: cortados parejo para que se cocinen del mismo modo y den ese sabor terroso
- Bambú: aporta textura y es muy suave, la versión en lata funciona perfecto
- Ajo fresco: sube el aroma, compra ajos grandes y gorditos
- Germen de bambú: estructura y aroma ligero, enlatado está bien
- Jengibre fresco: trae ese toque picantón, rállalo justo antes de usarlo
- Brotes de agua: súper crocantes, no uses latas que tengan el líquido turbio
- Caldo de pollo bajo en sodio: equilibra la salsa, prueba antes de ponerle más sal
- Azúcar moreno: endulza suave, mejor si está suelta y blanda
- Aceite de sésamo: acaba el plato con aroma a frutos secos, guarda en un lugar fresco
- Chícharos chinos: color y frescura, busca los que estén bien verdes y sin marcas
- Cebollín fresco y semillas de sésamo: ponlos justo al final para que no pierdan punch
Pasos Muy Fáciles
- Prepara el Pollo
- Mete el pollo cortado junto con el ajo en polvo, salsa de soya, un poco de sal, pimienta y fécula de maíz en un bowl. Mezcla bien hasta que cada pedazo quede forrado, así todo después queda bien jugoso
- Dora el Pollo
- Pon aceite en un sartén grande o wok a fuego medio-alto. Echa el pollo que quede en una sola capa. Deja sin mover unos cuatro minutos, dale la vuelta y saca cuando esté dorado fuerte por ambos lados. Reserva para que no se pase de cocción
- Saltea las Verduras
- Agrega un poco más de aceite en el mismo sartén. Empieza con las zanahorias unos dos minutos, luego echa los brotes de agua y chícharos chinos. Después añade los champiñones, germinados de bambú y el ajo fresco. Mueve todo cada rato, otros cinco o seis minutos va perfecto para que queden vivos y crujientes
- Haz la Salsa
- Mientras cocinas las verduras, mezcla en un recipiente la salsa de soya, azúcar moreno, fécula de maíz, ajo picado, jengibre rallado, caldo de pollo y aceite de sésamo. Que la fécula de maíz se disuelva bien y no queden bolitas
- Revuelve Todo y Termina
- Vuelve a poner el pollo ya cocido con las verduras y vierte la salsa encima. Junta bien y deja que burbujee un par de minutos para que espese y todo se impregne de sabor. Sirve en caliente y agrega cebollín fresco y semillas de sésamo por arriba

Los brotes de agua para mí son lo máximo. Ese crunch es como una fiesta cada vez que muerdes y mi papá siempre se robaba un puñado más cuando lo cocinábamos juntos. De pequeña me gustaba aplastar los champiñones, era mi pequeña rebeldía de chef.
Cómo Guardarlo
Mete lo que sobre en un tupper con tapa y guárdalo en el refri hasta tres días. Al recalentar la salsa se pone más espesa, así que echa un chorrito de caldo de pollo o agua para soltarla. Mueve suave para que el pollo siga jugoso y las verduras no se rompan.
Cambios Prácticos
Si no hay chícharos chinos puedes poner ejotes o hasta guisantes. Pechuga de pollo puede cambiarse por muslos deshuesados para un sabor más intenso. Para hacerlo sin gluten usa tamari en vez de salsa de soya. Los champiñones blancos también quedan bárbaros si no hay shitake ni cremini. Si quieres más verduras, suma brócoli o mini elotitos.

Ideas para Servir
Pon este Moo Goo Gai Pan sobre arroz jazmín o integral y que el arroz chupe toda la salsa sabrosa. Si prefieres algo más ligero, sírvelo con arroz de coliflor o acompáñalo con una ensalada de pepino fresquita. También va bien con fideos o en hojas de lechuga para un toque crujiente y divertido.
Historia Atractiva del Moo Goo Gai Pan
Moo Goo Gai Pan significa más o menos pollo con champiñones en cantonés. Se hizo muy famoso en restaurantes chinos en Estados Unidos porque es suave y lo puedes adaptar fácil. La mezcla de pollo suave y verduras coloridas lo convierte en un clásico de toda la vida en la mesa familiar. Mi versión respeta ese estilo clásico y lo hace sencillo para noches ocupadas.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué significa Moo Goo Gai Pan?
Es el nombre cantonés de un platillo con pollo, champiñones y verduras salteados en salsa sabrosa.
- → ¿Puedo poner otras verduras?
Claro, prueba con brócoli, pimientos, maíz tierno o tirabeques. Todas combinan perfecto.
- → ¿Cómo hago para que el pollo quede jugoso?
Lámina el pollo finito a contrapelo y cúbrelo con un poco de maicena antes de saltear. Quedará mucho más tierno.
- → ¿El Moo Goo Gai Pan pica?
No, suele ser suave. Pero si quieres darle chispa, añade un poco de chile seco o fresco.
- → ¿Con qué puedo acompañar el plato?
Arroz blanco, arroz integral o hasta arroz de coliflor quedan buenísimos al lado.
- → ¿Se puede dejar listo antes?
Sí. Deja cortadas las verduras y el pollo preparado. Solo saltea al final para que quede en su punto.