
Esta pasta súper cremosa con bacon es mi salvación cuando quiero un plato sabroso y que no me complique la vida. El bacon crujiente se junta con tomatitos frescos para una salsa que tiene todo lo que me encanta como comida reconfortante. Te pone una sonrisa en la cara en nada y levanta el ánimo cualquier día de entre semana.
Me saqué de la manga esta pasta un día lluvioso viendo que había tomates cherry olvidados y un poco de bacon en la nevera. Desde entonces, cuando hay comida familiar nunca sobra ni un poco.
Ingredientes
- Perejil fresco: al final suma color y frescor. Fíjate en que esté bien verde y sano.
- Espaguetis: elige pasta de buena calidad para que todo quede más rico.
- Parmesano: mejor si lo rayas tú mismo. Así le da sabor y cremosidad hasta el final.
- Queso crema: mezcla todo y deja la salsa súper suave. Mejor si lo usas a temperatura ambiente.
- Copos de chile: ajusta el picante como te apetezca.
- Tomatitos cherry: dan el toque fresco y dulce. Si están bien rojos, mucho mejor.
- Nata para cocinar: usa una buena nata para que la salsa quede bien sedosa.
- Concentrado de tomate: potencia todo el sabor. Si puedes, que sea uno bueno.
- Caldo de pollo: la base que hace todo más sabroso. Mientras más natural, mejor.
- Ajo: el sabor clave. Usa dientes frescos y pícalos pequeño.
- Bacon: el protagonista crujiente. Compra bacon con algo de grasa intercalada, así queda perfecto.
- Pizca de cayena: suma calidez y un puntito de picante. No te pases de cantidad.
- Pimienta negra: mejor recién molida para más aroma.
- Cebolla en polvo: sabor sin trozos. Asegúrate que no esté caducada para que se note más.
- Mostaza en polvo: remata la salsa con un toque especiado. Vigila que esté bien seca y sin grumos.
- Albahaca seca: va súper bien con tomate y le da frescura. Elige una bien verde.
- Orégano seco: para aroma mediterráneo y profundidad. Huélelo para ver si está potente.
Guía paso a paso
- Sirve y disfruta:
- Reparte la pasta cremosa en los platos y pon por encima el bacon frito y el perejil. Un poco de pan de ajo queda genial con esto. La salsa espesa rápido así que no esperes para comer.
- Mezcla la pasta:
- Conecta los espaguetis directamente de la olla a la salsa usando unas pinzas. Mézclalos bien y déjalos un minuto a fuego bajito para que la pasta se empape.
- Añade el parmesano:
- En el último momento, echa el parmesano poco a poco con el fuego bajo. Así la salsa queda súper cremosa y no se corta.
- Cuece los espaguetis:
- Pon un montón de sal al agua y cuando hierva ponte a cocer los espaguetis, pero saca un minuto antes de lo habitual. Así se empapan bien con la salsa después.
- Suma los tomates y el queso crema:
- Ahora los tomatitos, la crema de queso y los copos de chile. Tapa la sartén a medias y deja que cueza suave hasta que los tomates revienten.
- Haz la base de la salsa:
- Echa el resto del caldo, el concentrado de tomate, las especias y la nata. Mezcla todo hasta que el tomate se integre y deja que hierva. Baja el fuego.
- Desglasa la sartén:
- Añade un chorro pequeño de caldo y raspa el fondo con una espátula para sacar todo el sabor. Ve agregando más caldo poco a poco, déjalo un par de minutos.
- Sofríe los aromáticos:
- Ahora el ajo picado va al aceite del bacon. Que se dore despacio pero sin quemar, así queda el sabor suave.
- Dora el bacon:
- Arranca con el bacon en frío y déjalo freír a fuego bajito hasta que esté bien dorado. Quita el exceso de grasa, pero guarda un poco en la sartén. Lo que se queda pegado abajo, ni se te ocurra tirarlo, ahí está todo el sabor.

Cosas útiles que debes saber
- Esa salsa cremosa se pega a la pasta genial
- Se puede recalentar fácil sin perder textura
- Va de lujo con cualquier tipo de pasta, no solo espaguetis
- Las hierbas frescas la hacen aún más sabrosa
- Juega con el nivel de picante a tu gusto
La parte crujiente del bacon es lo que más me flipa. No sólo da montones de sabor, también queda arriba perfecto y crujiente. Mi hermano siempre dice que esta mezcla es el plato que más le alegra el día y a mí me recuerda a cuando vivíamos juntos de estudiantes.
Cómo guardarla
La pasta con bacon dura cubierta tres días en frío sin problema. Divide en tuppers si quieres porciones pequeñas. Para recalentar, échale un pelín de agua o nata y ve calentando despacio para que la salsa siga cremosa.
Cambios posibles
Si prefieres más ligero, cambia la mitad de la nata por leche. También la nata baja en grasa arregla bien. Para veganos, sustituye el bacon por tofu ahumado y el caldo de pollo por de verduras. Si lo que buscas es frescura, mete un puñado de espinacas frescas justo al final y listo.

Ideas para servir
Esta pasta tan cremosa va genial con una buena ensalada verde. También el pan de ajo o una baguette al horno quedan de lujo. Y si eres fan del parmesano y del picante, échale extra antes de llevarlo a la mesa.
Un poco de historia
Eso de juntar bacon, pasta y salsa cremosa de tomate es de lo más típico del día a día italiano. Con el tiempo, la receta fue cambiando mil veces. En Italia y en mi casa el bacon (o panceta) casi siempre se roba el show en los platos familiares. La mezcla de bacon sabroso y todo lo cremoso nunca falla.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Cómo hago el bacon bien crujiente?
Haz el bacon en la sartén con fuego suave, así agarra ese toque crujiente parejo. Ponlo en papel de cocina para quitar el exceso de grasa.
- → ¿Puedo cambiar la pasta por otra?
Claro que sí. Usa penne, fusilli o la que tengas a mano, quedan geniales también.
- → ¿Qué hago para que la salsa salga súper cremosa?
Deja el queso fresco fuera del refri antes de usarlo y cuando vayas a poner el parmesano, mantén el fuego bajito para no cortar la salsa.
- → ¿Hay forma de hacer este plato más ligero?
Sí, cambia parte de la nata por leche o usa nata de cocina para aligerar la salsa.
- → ¿Es obligatorio ponerle chile seco?
No hace falta, ponle solo si te gusta el picante. Si prefieres, sáltatelo.