
Este platillo cremoso con verduras y cacahuate calienta el alma y da un toque distinto a la mesa familiar. Entre capas de berenjena, carne jugosa, esa salsa de cacahuate tipo bechamel, y un poco de queso feta encima, te olvidas de los clásicos de toda la vida. Va genial si buscas algo diferente para cenas o un domingo especial.
Siempre pienso en un fin de semana otoñal tranquilo cuando me atreví por primera vez a cambiar la bechamel de siempre por cacahuate. Mi familia quedó feliz. Desde entonces, la preparamos siempre que queremos sorprender a alguien que viene a casa.
Sabrosos ingredientes
- Berenjenas: dan textura y absorben todo el sabor busca las firmes y brillosas en el súper
- Carne molida: aporta fuerza y deja satisfecho; la de res es clásica y cordero tiene un toque intenso
- Cebolla: suma dulzura y sabor base trata de que sea lo más fresca posible
- Ajo: le da ese punto mediterráneo y aroma usa dientes bien jugosos
- Tomate triturado: aporta ese toque afrutado escoge el más sabroso que encuentres
- Cacahuate tipo crema: la responsable de la bechamel más cremosa y con gusto a nuez mejor si no tiene mil ingredientes raros
- Leche entera: aporta suavidad y mientras más grasa tenga, más rica queda la salsa
- Feta o parmesano: da el remate con ese toque saladito mejor si lo trituras en casa
- Piñones tostados: para un crunch irresistible y ese aroma a tostado pídelos claritos en la tienda
- Canela: un dulzor suave que no tuerce el sabor cuida que sea de buena calidad
- Orégano: para que huela y sepa a Mediterráneo mejor del orgánico en hojas
- Sal y pimienta: esenciales al gusto la pimienta recién molida resalta todo
Guía fácil paso a paso
- Hornea y deja reposar:
- Mete la charola al horno caliente, a ciento noventa grados y deja que se dore en cuarenta y cinco a cincuenta minutos. Cuando esté bien dorada arriba, déjala descansar diez minutos para que agarre consistencia y no se deshaga al servir.
- Hora de armar las capas:
- Engrasa un refractario y pon una base de la mitad de las berenjenas, seguido de la mitad de la carne. Esparce parejo, repite con lo que quedó y encima ve la salsa cremosa de cacahuate. Termina con tu queso y esparce los piñones si quieres.
- Bechamel de cacahuate fácil:
- Derrite mantequilla en una olla bajita, echa harina y mueve hasta que huela rico. Agrega la leche poco a poco batiendo sin parar para evitar grumos. Cuando espese, mezcla la crema de cacahuate con paciencia hasta que quede suave.
- Dale sabor a tu salsa de tomate:
- Pon los tomates triturados (con jugo) en la sartén donde doraste la carne. Agrega orégano y canela, revuelve y cuece a fuego bajo sin tapa quince minutos. Ajusta con pimienta y sal.
- Empieza con la salsa de carne:
- Sofríe la cebolla en aceite, a fuego medio, hasta que se transparente, unos ocho minutos. Luego va el ajo picadito y deja otro minuto para que suelte olor. Agrega la carne, rompe los trozos con cuchara y deja que tome color bien doradita para el sabor.
- Desagua las berenjenas:
- Espolvoréalas con sal, ponlas en un colador y olvídate de ellas treinta minutos. Seca bien con papel absorbente. Así te quedan menos amargas y no chupan tanto aceite después.

Detalles clave
- Preparas con anticipación y solo recalientas después
- Llena y aporta buena dosis de proteínas
- Con solo cambiar proteína, la haces vegetariana fácil
No puedo negar que la crema de cacahuate es lo más adictivo. La salsa queda tan cremosa que no deja a nadie indeciso. En casa siempre hay competencia por el pedazo con el queso doradito del borde.
Cómo guardar y recalentar
Puedes montar todo un día antes y luego solo meter la fuente al horno para que vuelva a estar como recién hecho. Cubriéndolo bien en el refri dura fresco unos dos días. Si sobra, parte en porciones, congela y recalienta rápido al micro o al horno. Así, hasta el lunch del día siguiente es otra historia.

Cambia el toque
Si quieres opción veggie solo necesitas sustituir la carne por lentejas pequeñas o champiñones picados. Conserva el sabor y la textura sorprenden. En vez de piñones usa nuez o anacardo tostado y cambia radicalmente.
Ideas para servir
Va espectacular con una ensalada fresca de hojas verdes y vinagreta de limón. Unos chorritos de aceite de oliva arriba intensifican el frescor. Si la acompañas con una copa de vino tinto potente, resaltan mucho más los sabores.
Historia rápida de la moussaka
Moussaka nació en el este del Mediterráneo y es la comida apapachadora de cada familia por allá. Esta vuelta con cacahuate es una idea inspirada por mi viaje a Grecia. Allá, las nueces son cosa de todos los días en las cocinas.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Cómo se preparan mejor las berenjenas?
Ponles sal a las rodajas y déjalas descansar unos 30 minutos. Así sueltan el agua y no amargan.
- → ¿Qué puedo usar si no quiero carne?
Lentejas cocidas o champiñones picaditos quedan geniales y tienen mucho sabor.
- → ¿Qué tipo de queso le va mejor a la moussaka?
Queso feta o un poco de parmesano rallado ayudan a que quede cremoso y más sabroso.
- → ¿Para qué sirve la mantequilla de maní aquí?
Le da a la bechamel una textura suave y un toque de nuez que va perfecto con los otros ingredientes.
- → ¿Se puede dejar listo el gratinado desde antes?
Sí, puedes armar la cazuela el día anterior y calentarla al momento de servir.