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Esta cazuela de ejotes es nuestro acompañante favorito que trae un toque cálido y nostálgico a la mesa. Une ejotes suaves con una salsa cremosa de champiñones y termina con cebolla frita crujiente que da el toque justo de textura.
Probé esta cazuela en una reunión de fiestas y me encantó cómo se volvió la estrella entre los vegetales. Ahora la veo como un abrazo calientito en las noches frescas.
Ingredientes Clave
- Ejotes frescos: limpios y cortados, aportan una textura crujiente y fresca — elige vainas firmes y verdes sin manchas
- Pequeña cebolla: picada finito para dar dulzura y aroma
- Mantequilla: para sofreír y darle sabor profundo a la salsa
- Ajo: picado bien chiquito para realzar el sabor de champiñones
- Sopa de crema de champiñones: la base cremosa con ese sabor umami tradicional
- Leche: para suavizar la salsa, lo ideal es leche entera para más riqueza
- Salsa de soya: un toque sabroso que equilibra la crema y las verduras
- Sal y pimienta negra: a tu gusto para realzar cada sabor
- Cebollas fritas crujientes: por encima para el contraste crocante y color dorado — usa las frescas en paquete para mejor textura
Pasos Para Cocinar
- Calienta el horno:
- Pon el horno a 190 grados Celsius para que esté listo cuando pongas la cazuela. Esto ayuda a que se cocine pareja y burbujee bonito.
- Hierve los ejotes:
- Cuécelos rápido en agua hirviendo hasta que estén tiernos pero aún firmes. Luego escúrrelos bien para que la cazuela no quede aguada y mantengan su color verde brillante.
- Sofríe los aromáticos:
- En un sartén grande derrite la mantequilla a fuego medio y agrega la cebolla picada. Cocina despacito hasta que esté transparente y suave. Después añade el ajo por un minuto hasta que huela bien rico.
- Haz la salsa:
- Incorpora la crema de champiñones, leche, salsa de soya, sal y pimienta negra. Revuelve bien hasta conseguir una mezcla suave y llena de sabor.
- Une y pasa al molde:
- Agrega los ejotes escurridos al sartén y mézclalos bien para que se empapen con la salsa. Vierte todo en un molde para hornear y distribúyelo parejo.
- Pon el topping y hornea:
- Espolvorea las cebollas fritas en cantidad generosa encima. Mete al horno y cocina por unos 25 minutos o hasta que la cubierta esté dorada y la salsa burbujeante.
Esta cazuela siempre me recuerda a esas cenas familiares donde todos compartíamos historias. Mi abuela me enseñó a vigilar la cebolla frita para que quede dorada sin quemarse. Ahora es tradición cocinarla juntos y pasar los secretos simples de la cocina casera.
Tips Para Guardar
Guarda las sobras tapadas en la nevera y calienta despacio en el horno para mantener la cebolla crujiente. Aguanta bien hasta dos días, ideal para planificar comidas. Si la congelas, hazlo antes de hornear y pon las cebollas fritas frescas al calentar para que sigan crocantes.
Cambios En Ingredientes
Prueba cambiar los ejotes por espárragos o chícharos en vaina para un toque primaveral. Si quieres, haz una salsa casera de champiñones para más sabor hecho desde cero. Para una versión vegana bien rica, usa leche de coco o crema de marañón en lugar de leche normal.
Ideas Para Acompañar
Esta cazuela queda genial con pavo al horno o jamón por su textura cremosa y cubierta crujiente. Combínala con un vino blanco fresco como Sauvignon Blanc o una cerveza ligera para reuniones. Pon puré de papas o arroz salvaje de lado para una comida bien completa.
Dar unos minutos de pausa a esta cazuela al sacarla del horno mejora la textura un montón. La salsa se asienta y la capa crocante se mantiene intacta en cada cucharada. Siempre es un placer cuando llega a la mesa.
Preguntas Frecuentes Sobre Recetas
- → ¿Cómo preparar las judías verdes antes de hornear?
Las judías se limpian, cortan y se hierven un poco hasta que estén tiernas pero firmes antes de mezclarlas con la salsa, así quedan crujientes tras el horneado.
- → ¿Se puede cambiar la sopa de champiñones?
Claro, se puede usar una salsa casera de champiñones o cualquier base cremosa parecida que mantenga la textura y el sabor bien ricos.
- → ¿Para qué sirve la salsa de soja aquí?
La salsa de soja aporta un toque umami sutil que realza los sabores sin taparlos.
- → ¿Cómo lograr una cubierta bien crujiente?
Se añade cebolla frita crocante justo antes de hornear y esta se pone dorada y crujiente con el calor del horno, dando un contraste genial en cada bocado.
- → ¿Se puede preparar con anticipación?
Por supuesto, se puede armar antes y guardar en la nevera; se hornea justo antes de servir para que la cebolla quede toda fresca y crujiente.
- → ¿Qué utensilios necesito para hacerlo?
Una sartén grande para saltear, un bol para mezclar los ingredientes y una fuente para horno son básicos.