
Si te gusta la mezcla de tarta de queso suave, cerezas frescas y un toque de chocolate, este Kirsch-Schoko-Cheesecake es irresistible. Crumble crujiente de galleta, relleno untuoso y capas de cereza hacen que cada bocado sea una delicia. Perfecto para endulzar momentos especiales o tardes de café tranquilas con amigos.
Principales ingredientes
- Galletas tipo Graham o de mantequilla trituradas: dan una base crujiente increíble, que va genial con el relleno usa siempre las más frescas y ricas que encuentres
- Manteca sin sal: une todo y aporta un sabor suave y mantecoso derrítela despacio para que no cambie de sabor
- Azúcar: para que el relleno quede dulzón usa azúcar fina y así mezcla mejor
- Queso crema: el corazón cremoso de este postre sácalo del refri antes para que esté blandito y sin grumos
- Extracto de vainilla: da un toque aromático delicioso usa vainilla natural, nada artificial
- Huevos: hacen la textura súper suave y mantienen el pastel en forma huevos grandes y frescos, ¡importante!
- Crema ácida o smetana: suma aún más cremosidad y un toque ácido rico cuida que esté fresca para el mejor sabor
- Cerezas en almíbar: para ese golpe frutal lo mejor son cerezas enteras o hazlas tú mismo si puedes
- Chips de chocolate: reparten trocitos de placer chocolatoso usa chocolate oscuro si quieres que sea más potente
Pasos para prepararlo
- Enfriar y decorar:
- Espera a que la tarta esté fría a temperatura ambiente primero. Luego, métela al refri (mejor toda la noche). Al servir, pon suficientes cerezas por encima y, si te animas, unos trozos de chocolate o cerezas frescas como toque especial.
- Hacer la base de galleta:
- Tritura las galletas hasta que estén bien finas. Mézclalas con manteca derretida y asegúrate de que todo esté bien humedecido. Presiona esta pasta en el fondo de un molde desmontable, apretando bien hasta que quede firme y parejo utiliza un vaso, es más fácil.
- Preparar la capa de queso:
- Deja el queso crema al tiempo. Bátelo con azúcar hasta que se vea liso y sin grumos, bien cremoso.
- Agregar vainilla y huevos:
- Añade la vainilla y después ve echando los huevos uno por uno. Bate suavemente después de cada uno, para que todo quede integrado
- Incorporar crema y chocolate:
- Mete la crema ácida y los chips de chocolate con cuidado, solo mezcla lo justo para no perder la textura ligera
- Hornear el cheesecake:
- Vierte la mezcla preparada sobre la base en el molde. Empareja con una espátula. Al horno precalentado a 160 grados, ponlo en el centro. Deja de 50 a 60 minutos, hasta ver que tiembla solo un poquito en el centro

Cosas clave
Disfrutas de cremosidad, chispa frutal y chocolate en cada porción. Ideal para adelantarse y tenerlo listo para invitados. Si prefieres, cambia cerezas por frambuesas o moras y sigue siendo delicioso. Lo mejor: las cerezas me llevan directo a cuando era niño y cosechaba con mi abuela. Este postre me sabe a recuerdos de verano
Cómo guardarlo
Siempre mantén el cheesecake cubierto en la heladera, así está fresco hasta tres días. Se puede congelar porciones, y al descongelarlas, casi no notarás la diferencia con el recién hecho. Un tupper bien cerrado ayuda a mantenerlo sin olores raros del refri.

Cambiar ingredientes
Si no tienes chips, mete chocolate blanco en trozos o nueces picadas. Sin cerezas, usa compota de blueberry o frambuesa, queda igual de bien. Para hacerlo sin gluten, elige galletas aptas, funcionan perfecto en la base
Ideas para servir
Sirve el cheesecake en un plato bonito y añade un montón de cerezas extras en cada rebanada. Un poco de crema batida y más cerezas frescas lo hacen aún más especial. Si eres más goloso, espolvorea ralladura de chocolate oscuro encima o acompaña con helado de vainilla
Un poco de historia
El cheesecake tiene raíces estadounidenses, pero su versión con frutas y chocolate lo hace veraniego y único. Aquí ganó terreno porque es fácil y riquísimo — cereza y chocolate juntos recuerdan una selva negra, pero sin tanta complicación
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué hago para que quede bien suave?
Trabajá el queso crema y todos los ingredientes cuando ya estén tibios. Así todo se mezcla sin grumos y el relleno queda bien cremoso.
- → ¿Y si quiero usar cerezas frescas?
Obvio, sólo quitales el carozo y si querés, poneles un poco de azúcar. Quedan geniales por encima o adentro del relleno.
- → ¿Cómo guardo el postre para que dure?
Guardalo en la heladera en un recipiente cerrado. Así te dura fresco y cremoso por varios días.
- → ¿Qué hay que tener en cuenta al hornear?
Cuando lo saques del horno, el centro tiene que moverse un poquito todavía. Así, cuando se enfría, queda súper cremoso.
- → ¿Ideas para decorar?
Poné algunas cerezas frescas, rallá chocolate arriba o espolvoreá un poquito de azúcar glas. Así se ve buenísimo.