
Este tazón japonés de arroz con pollo y huevos es súper reconfortante. El pollo queda suave porque se cocina en un caldo lleno de sabor, y los huevos cremosos se mezclan con el arroz esponjoso. Ideal para relajarte después de un día largo.
Cuando busqué algo que me calmara y llenara al mismo tiempo, hice este platillo por primera vez. Pronto fue un favorito para noches tranquilas en familia.
Ingredientes Clave
- Dos tazas de arroz japonés de grano corto ya cocido: Es la base pegajosa y esponjosa que necesita el tazón. Lo ideal es que esté recién hecho y templado para que todo se mezcle bien.
- Dos muslos de pollo sin piel ni hueso cortados en pedacitos: Dan jugosidad y buen sabor. Los muslos mantienen mejor la humedad que la pechuga.
- Un cebollita pequeña rebanada delgada: Le agrega dulzura natural y cuerpo cuando se cocina suave. Busca que esté firme y crujiente para mejor textura.
- Dos huevos grandes: Brindan una capa suave y cremosa que envuelve el pollo y el caldo. Huevos frescos son la mejor elección para el sabor y textura.
- Una taza de dashi: Es un caldo japonés hecho con algas y copos de bonito que da un sabor umami increíble. Si consigues hecho en casa o de buena calidad, mejor.
- Tres cucharadas de salsa de soya: Añaden sabor salado y color. Que sea soya natural para mantener el auténtico gusto.
- Dos cucharadas de mirin: Es un aderezo de arroz dulce que equilibra la sal y da un toque suave.
- Una cucharada de azúcar: Refuerza el sabor armonioso del caldo.
- Una cebolleta verde picadita fina: Sirve para decorar y sumar frescura al final. Las partes verdes brillantes ayudan a que se vea más vivaz.
Pasos Para Cocinar Fácil
- Primero haz la base:
- En una olla pequeña mezcla dashi, soya, mirin y azúcar. Calienta a fuego medio hasta que hierva suave y se empiecen a mezclar los sabores. Te va a dejar un olor rico en la cocina que abre el apetito.
- Después cocina pollo y cebolla:
- Agrega la cebolla y los pedazos de pollo en el caldo que ya hierve suave. Cocina hasta que el pollo esté blando y completamente cocido, y la cebolla se vea translúcida y suave. Esto hace que el caldo tenga un sabor profundo y acogedor.
- Ahora añade los huevos:
- Bate ligeramente los huevos en un tazón aparte. Vierte despacio sobre el pollo y la cebolla en la olla. Cubre con tapa y deja que los huevos se cocinen hasta que queden firmes pero suaves y sedosos. Esa textura cremosa hace que el platillo sea tan especial.
- Arma el tazón:
- Sirve el arroz caliente en tus platos. Pon encima despacio el pollo con huevos y asegúrate de echar bastante caldo para que el arroz absorba todo el sabor umami.
- Para finalizar, decora y sirve:
- Espolvorea la cebolleta picada para dar frescura y color. Disfrútalo de inmediato cuando todo esté calientito y tierno.

Hacer esto me trae recuerdos bonitos de cenas familiares donde siempre compartíamos risas y historias. Es un plato sencillo que invita a la charla y al confort. Recuerdo la alegría que sentí al darle Oyakodon a mis hijos cuando empezaron a engancharse con los sabores caseros japoneses.
Tips Para Guardar
Opciones para Cambiar Ingredientes
Ideas para Acompañar

Este tazón japonés calentito es una manera linda de traer comodidad y sabor a tu mesa. Ponle tu toque con estos consejos y los recuerdos que evoca.
Preguntas Frecuentes Sobre Recetas
- → ¿Qué arroz va mejor para este plato?
El arroz japonés de grano corto es el mejor por su textura pegajosa y suave que aguanta bien el caldo y los ingredientes encima.
- → ¿Se puede usar otro corte de pollo?
Lo mejor son muslos sin piel ni hueso por ser más suaves, pero si quieres puedes usar pechuga cuidando que no se seque al cocinarla.
- → ¿Cómo consigo huevos suaves y sedosos sin pasarlos de cocción?
Vierte los huevos batidos despacio sobre el pollo que está a fuego lento y tapa la olla. Solo cocina hasta que los huevos estén firmes pero aún un poco líquidos para esa textura cremosa.
- → ¿Qué es el mirin y puedo cambiarlo?
El mirin es un vino dulce de arroz japonés para dar sabor. Si no tienes, mezcla sake con azúcar en partes iguales como sustituto.
- → ¿Cómo sirvo el plato para que quede mejor?
Sírvelo de inmediato mientras está caliente para disfrutar el huevo suave y el caldo que se empapa en el arroz.
- → ¿Puedo guardar y calentar las sobras?
Se pueden guardar en la nevera solo un día pero al calentar cambia la textura suave del huevo. Lo mejor es comerlo fresco.