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Este plato de pollo con dulce de arce y batata es una comida completa y saludable que mezcla sabores dulces y ácidos con ingredientes naturales. Las batatas asadas aportan un toque dulce y cálido, mientras que el pollo con glaseado de mostaza y arce le da un sabor diferente y vibrante. Las hojas frescas de espinaca traen un crujido fresco que completa cada porción, haciendo este plato ideal para cualquier día.
La primera vez que preparé esto fue en una noche ocupada y me encantó lo rápido que se armó sin perder ese toque especial. Desde entonces, es uno de esos platos que reconfortan y no fallan.
Ingredientes Clave
- 900 gramos de pechuga de pollo sin hueso ni piel: para proteína magra y fácil de cocinar
- Tres batatas grandes: peladas y en cubos, para una base dulce y resistente; elige batatas firmes y con color intenso sin manchas
- Dos cucharadas de aceite de oliva: para que las verduras queden perfectas al horno y el pollo al sartén
- Condimentos: ajo en polvo, cebolla en polvo, pimentón ahumado, sal y pimienta para aportar un toque cálido y con carácter
- Dos tazas de espinaca fresca: que añaden un contraste crujiente y vitaminas
- Un cuarto de taza de perejil picado: para decorar y dar un toque de aroma fresco, opcional
- Ingredientes para glaseado de arce y Dijon: un cuarto de taza de mostaza Dijon, un cuarto de taza de jarabe de arce puro, una cucharada de vinagre de manzana y una cucharada de aceite de oliva
- Escoge productos frescos y de buena calidad: para sacar el máximo sabor al plato
Pasos para Preparar
- Prepara las batatas al horno:
- Calienta el horno a 200 grados Celsius. Mezcla las batatas en cubos con aceite y las especias para que queden bien cubiertas. Colócalas en una bandeja con papel y hornea hasta que estén doradas y tiernas, dándoles la vuelta a la mitad del tiempo para que caramelicen bien.
- Saltea el pollo:
- Mientras las batatas se hornean, calienta una sartén antiadherente a fuego medio alto. Salpimienta el pollo cortado y cocina hasta que esté dorado y bien hecho. Aparta el pollo y deja que repose un rato.
- Haz la salsa de arce y mostaza:
- En un bol pequeño mezcla la mostaza Dijon, el jarabe de arce, el vinagre, el aceite, la sal y la pimienta hasta que la salsa quede cremosa. Esta mezcla aporta un buen balance de dulce y ácido al plato.
- Glasea el pollo:
- Regresa el pollo a la sartén y echa la salsa encima. Revuelve con cuidado para que cada trozo quede cubierto. Cocina un par de minutos más para que la salsa se espese y forme un brillo sobre el pollo.
- Arma los platos:
- Reparte las batatas asadas y el pollo glaseado en platos o boles. Añade hojas de espinaca fresca para darle textura y color. Si quieres, termina con perejil picado y un poco más de salsa para un toque final fresco y sabroso.
La vez que preparé este plato en casa, todos quedaron encantados con la mezcla de pimentón ahumado y dulzura del arce. Picar perejil fresco para decorar le da un toque inesperado que levanta todo el sabor. Me recuerda esas tardes de otoño, cuando la cocina huele a casa y a algo rico.
Cómo Guardar Lo Que Sobra
Si te queda pollo y batatas, guárdalos en un recipiente hermético en la nevera hasta tres días. Calienta con cuidado para que no pierdan humedad ni textura. La espinaca ponla aparte para que siga fresca y añádela justo antes de comer. Si quieres un plato rápido, calienta el pollo con un poco de agua o caldo para que la salsa quede líquida.
Opciones para Cambiar Ingredientes
Prueba cambiar la espinaca por kale o rúcula si te gusta algo con más sabor y textura. Puedes usar muslos de pollo en lugar de pechugas para que quede más jugoso. También quita o pon verduras asadas, como pimientos o coles de Bruselas, para más variedad. Cambia la cantidad de jarabe de arce si prefieres que quede más dulce o más suave.
Qué Acompaña Mejor
Sirve con una ensalada sencilla de quinoa o arroz integral para sumar fibra y granos enteros. Un vino blanco fresco como Sauvignon Blanc va perfecto con la mezcla dulce y ácida de la salsa. En invierno, acompaña con verduras de raíz al horno para un toque más calentito y reconfortante.
Cambios según la Estación
En primavera, agrega espárragos o guisantes con ralladura de limón para algo más fresco. En verano, trae maíz fresco o tomates heirloom para darle alegría al plato. En invierno, cambia la espinaca por acelgas salteadas o kale y mete especias como canela o nuez moscada en el glaseado para una sensación más cálida y acogedora.
Este plato es genial para preparar con anticipación. Cocina las batatas y el pollo hasta tres días antes. Guarda todo separado y arma rápido justo antes de comer. Así reduces el tiempo en la cocina sin perder el sabor ni la textura.
Preguntas Frecuentes Sobre Recetas
- → ¿Qué tipo de pollo es mejor para este plato?
Las pechugas sin piel ni hueso funcionan muy bien porque se cocinan rápido y absorben muy bien la salsa dijon y maple, dejando bocados jugosos y llenos de sabor.
- → ¿Cómo saber cuándo las batatas están listas?
Deberían estar suaves al pincharlas con un tenedor y doradas con un tono caramelizado tras unos 25-30 minutos en el horno.
- → ¿Puedo cambiar la dulzura de la salsa maple dijon?
Claro, solo agrega más o menos jarabe de maple según te guste y ajusta la mostaza para que quede equilibrada.
- → ¿Cómo darle un toque picante al plato?
Agrega una pizca de chile rojo en hojuelas en la salsa maple dijon para que tenga un golpe suave sin tapar los otros sabores.
- → ¿Cómo guardar las sobras para que duren bien?
Mete los boles cocidos en un recipiente cerrado y guárdalos en el refrigerador hasta 3 días. Calienta bien antes de comer.