
Este pan de masa madre fue el que me convenció de que todos pueden hornear pan delicioso en casa. La corteza crujiente y la miga suave dejan la cocina oliendo increíble y hacen que las mañanas sean espectaculares.
La primera vez que lo llevé a una cena, el pan se esfumó antes de que llegara la comida principal. Hasta hoy mis amigos me preguntan cuándo lo llevo de nuevo.
Ricos ingredientes
- Aceite de oliva: ayuda a que la masa no se pegue—usa extra virgen para más aroma
- Azúcar: hace que la fermentación sea más rápida y el pan se dore mejor, la blanca fina se integra fácil
- Sal: resalta el sabor y ayuda a controlar la fermentación, la de mar o kosher queda genial
- Agua tibia: alrededor de 43°C para arrancar la levadura, usa filtrada si puedes
- Harina de todo uso: sirve para conseguir miga esponjosa y corteza con mordida—elige la más fresca posible
- Fermento de masa madre activo y espumoso: aporta el sabor ácido, asegúrate que flote en agua
Fáciles pasos a seguir
- Deja enfriar y come
- Pon tu pan sobre una rejilla antes de partirlo, así la miga queda ideal
- Anota unas líneas y hornea
- Precalienta el horno a 232°C. Justo antes de hornear, haz cortes decididos en el pan para que salga el vapor. Hornea de 25 a 30 minutos y revisa que suene hueco y la corteza esté dorada
- Reposa otra vez
- Tápalo y deja que suba otras 1 o 2 horas hasta que al apretarlo se vea esponjoso
- Arma el molde
- Saca el aire a la masa suavemente, dándole forma de bola, y déjala sobre papel para hornear
- Primer levado (crecimiento largo)
- Pon la masa en un bol aceitado, cúbrela y déjala en un rincón tibio entre 4 y 6 horas para que doble su tamaño—ese tiempo es clave para el sabor
- Amasa a mano
- Pasa la bola a la mesa un poco enharinada y trabaja unos 10 minutos, hasta que sientas que está lisa y elástica. Si la tocas suavemente, debería volver a su lugar
- Agrega lo seco
- Pon poco a poco harina y sal mientras remueves con cuchara firme hasta tener una masa pegajosa y desordenada
- Haz la mezcla
- Mete el fermento, agua y azúcar en un mismo bol grande y mueve hasta disolver el azúcar

Al final, mi masa madre terminó siendo casi mi mascota. Me atrapó tanto que ahora siempre quiero hornear. Mi familia es feliz cuando le agrego semillas o hierbas frescas a la mezcla.
Tips para guardar
Guarda el pan envuelto en un trapo limpio o una bolsa de papel a temperatura ambiente para que quede crujiente por fuera y blandito por dentro. No uses recipientes cerrados porque la corteza se pone chiclosa. Si te sobra mucho, rebánalo y mételo al congelador; después tuéstalo tal cual al sacarlo.
¿Qué puedes cambiar?
Si te quedas sin harina común, usa la de pan para más textura o mezcla con integral para un toque fuerte. Cámbiale el azúcar por miel para que quede más suave. Y si no tienes aceite de oliva, usa mantequilla derretida o aceite neutro sin problema.

Ideas para disfrutar
Este pan se luce con sopas, sobre todo de tomate o lentejas. Si lo quieres al desayuno, prueba con mantequilla de maní y miel, o ricotta fresca y unas hierbas. Queda increíble en tostada de aguacate, para hacer tostadas francesas o incluso en sándwiches de queso fundido.
Contexto cultural
La masa madre tiene historia en muchísimas culturas, desde Egipto hasta los pioneros de San Francisco. Es el pan de levadura natural original, hecho solo con paciencia, harina y agua. La fermentación lenta da sabor y textura que nunca vas a lograr con el pan rápido del súper.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Puedo usar harina integral en vez de blanca?
Claro, puedes cambiar parte o toda la harina blanca por integral, pero tu pan será más denso y tendrá un sabor más intenso. Tal vez debas poner un poco más de agua.
- → ¿Por qué me queda el pan apretado?
Si queda pesado suele ser porque no fermentó lo suficiente, el fermento está flojo o no lo amasaste bien. Asegúrate que tu masa suba y el fermento esté activo con burbujas.
- → ¿Hay que usar aceite de oliva para engrasar?
No es obligatorio, solo ayuda a que no se pegue. Puedes usar cualquier aceite suave o nada más espolvorear harina en el bol.
- → ¿Cómo logro que la corteza quede más crocante?
Pon una bandeja con agua en la parte baja del horno cuando hornees. El vapor hace que el pan suba más y que la corteza quede súper crujiente.
- → ¿Para qué sirven los cortes en el pan antes de hornear?
Los cortes dejan salir vapor y ayudan a que el pan crezca sin reventar todo. También le dan ese look rústico tan sabroso.
- → ¿Puedo darle más sabor con especias o ajo?
¡Sí! Mezcla hierbas picadas, ajo en polvo o frutos secos antes de formar el pan para darle tu propio toque.