
Estas mini hamburguesas de jamón y queso suizo convierten ingredientes súper sencillos en lo más irresistible para picar en reuniones. El toque dulce de los panecillos hawaianos va genial con el jamón salado y el queso suizo fundido. En cuanto las pongas en la mesa, vuelan, te lo aseguro.
Las preparé la primera vez para una reunión del Super Bowl del barrio hace muchos años y desde entonces no me dejan llevar otra cosa. El hijo adolescente de mi amiga llegó a comerse ocho de una sentada y todavía me lo recuerda cada vez que nos vemos.
Ingredientes deliciosos
- Panecillos hawaianos dulces: súper esponjosos y dulces, equilibran muy bien los ingredientes salados. Busca paquetes donde no estén separados porque así es más fácil armarlas
- Jamón de charcutería: en rebanadas bien delgaditas para que queden en capas. Black Forest o jamón con miel quedan espectaculares
- Queso suizo: se derrite genial y tiene un sabor suave y apenas nuez. Mejor pídelas recién cortadas en la charcutería
- Mantequilla: es la base de la salsa. Tiene que ser mantequilla real, no margarina, ¡cambia todo!
- Mostaza amarilla: suma un gustito ácido que equilibra el resto. Usa la típica americana
- Salsa Worcestershire: aporta ese saborcito a umami, no te pases porque con poquito basta
- Cebolla seca picada: da sabor sin dejar trozos ni exceso de agua. Revisa que esté fresca
- Queso parmesano: opcional, pero da un toque crujiente encima. Mejor recién rallado
- Perejil seco: le pone color y un saborcito a hierba suave. Frótalo un poco con los dedos antes de espolvorear, así suelta más olor
Fáciles instrucciones paso a paso
- Arranca y calienta:
- Pon tu horno a 350°F y forra tu bandeja (9x13) con papel aluminio. Así el calor llega bien parejo y los panecillos se doran chévere arriba. Rocía el aluminio con aceite en spray para que no se peguen luego.
- Corta los panecillos:
- Deja los panes juntos y corta todo a la mitad en horizontal con un cuchillo de sierra. Es mucho más cómodo que individual. Asegúrate de que el cuchillo esté bien filoso para no deshacer el pan.
- Base primero:
- Pon la parte de abajo de los panecillos en la bandeja. Haz una buena capa de jamón usando la mitad, que quede repartido y que sobreponga un poco.
- Pon el queso:
- Cubre el jamón totalmente con las lonjas de queso suizo, si tienes que encimarlas un poco está bien. Así el queso se funde y ayuda a que el pan no se humedezca de más. También ayuda a pegarlo todo.
- Completa el relleno:
- Encima del queso, pon el jamón restante, así tienes doble capa de jamón con el queso en el medio. Aprieta suave para que todo quede parejito y se mantenga unido.
- Haz la salsa mágica de mantequilla:
- Derrite la mantequilla en microondas y luego mézclala con mostaza, salsa worcestershire, cebolla seca, sal y pimienta. Bate bien hasta que esté todo integrado, sin grumos.
- Echa la salsa:
- Vierte la salsa de mantequilla sobre los panecillos, cubriéndolos totalmente. Dale 5 a 10 minutos para que se absorba rico antes de hornear.
- Primer horneado:
- Tápalo todo con papel aluminio y hornea 20 minutos, así se derrite bien el queso y se mezclan los sabores sin quemar arriba.
- Dorado final:
- Saca el aluminio y hornea 5 minutos más, hasta que veas la parte de arriba bien doradita y crujiente.
- Termina y sirve:
- Si quieres, pon parmesano y perejil cuando aún estén calientes. Corta siguiendo donde ya están separados los panes y sírvelos al tiro. El contraste de crocante afuera y pegajoso por dentro es lo máximo en ese momento.

La salsa Worcestershire es la estrella escondida aquí. Cuando mi hermana me pasó esta receta, la primera vez puso el doble por error y descubrimos que el sabor era aún más adictivo. Ya nunca le pongo menos, ¡ese toque extra hace que todos quieran repetir!
Magia para dejar listos con anticipación
Lo mejor de estas mini hamburguesas es que te salvan si las dejas listas antes. Arma todo hasta la parte de la salsa, tapa bien con film y mételas al refri toda la noche. Sácalas media hora antes para que no estén tan frías, pon la salsa y directo al horno. Así incluso quedan con más sabor porque todo se mezcla más.
Otras ideas buenísimas para variar
Aunque la clásica de jamón y queso suizo es insuperable, puedes cambiar según gustos. Pruébalas con pavo y provolone si quieres algo más liviano o con pepperoni y mozzarella para una versión italiana. La salsa va bien con todas, solo ajusta las especias si usas pepperoni y ponle hierbas italianas.
Ideas para acompañar
Van bien para cualquier ocasión. Júntalas con ensalada verde si quieres cena completa, papas fritas para almuerzo informal o un platón de verduras si es para picotear. Van genial con encurtidos, ensalada de col o ensalada de papas si es tipo picnic. Y en brunch quedan riquísimas con una bandeja de frutas para dar contraste dulce-salado.
El origen de esta adicción
Las sliders de pan hawaiano se pusieron de moda fuerte en Estados Unidos a principios de los 2010, en reuniones y fiestas de fútbol. Salieron de la típica sándwich de jamón y queso, pero con salsa de mantequilla y panes dulces se volvió otra cosa totalmente distinta. Lo rico está en mezclar el pan dulce, relleno salado y la salsa mantequillosa con ese toque umami, por eso no puedes parar de comerlas.

Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Se pueden dejar armados los sliders antes de hornear?
Sí, puedes dejar listos los sandwiches hasta un día antes. Solo espera a echarles la mantequilla hasta el momento de meterlos al horno. Guárdalos tapados en la nevera y ponles el baño justo antes de hornear y servir.
- → ¿Cómo guardo y recaliento los sliders que sobran?
Guárdalos en recipiente cerrado dentro del refri por dos o tres días. Para calentarlos, mételos unos 10 minutos en horno a 160 °C y así quedan bien dorados, no chiclosos como con microondas.
- → ¿Puedo cambiar el queso o el jamón en estos sliders?
Claro, no hay problema. Prueba con provolone, cheddar o hasta pepper jack. Y si prefieres otro fiambre, puedes usar pavo, roast beef o pepperoni. Solo usa porciones parecidas para que todo se cocine parejo.
- → ¿Hay forma de que queden menos mantecosos?
Sí, échales solo 1/4 de taza de mantequilla en vez de media. Así salen menos jugosos y el pan más crujiente, pero igual se siente el sabor.
- → ¿Por qué no se separan los bollos al armar?
Dejar los bollos juntos facilita poner el relleno, ayuda a que todo quede parejito y no pierdan la forma cuando horneas. Así además la salsa no los empapa de más, solo se reparte entre ellos.
- → ¿Con qué puedo acompañar estos sliders de jamón?
Van genial con ensaladas frescas, papas fritas, coleslaw o sopa ligera si los sirves como comida. Si es picoteo, saca bandeja de verduras, huevos rellenos o brochetas de fruta y quedan perfectos todos juntos.