
Cuando llega antojo de algo dulce sin previo aviso o aparecen visitas de repente, este postre de rollos de canela con manzana siempre nos salva la tarde. Prácticamente no tienes que trabajar mucho y ese olor cálido a canela junto con las manzanas doradas enamora a cualquiera cada vez.
En una reunión con la familia en otoño la probé por primera vez y desde ahí es la favorita del grupo porque todos acaban sonriendo después de probar un bocado.
Esenciales y por qué los necesitas
- Rollos de canela listos para hornear: logran que cada bocado quede suave y con buen saborcito a canela. Si vienen con glaseado, mejor aún.
- Manzanas doradas en trocitos: les va genial ese toque jugoso y fresco. Busca que sean de buena calidad y que no traigan mucha azúcar extra.
- Crema batida: une todo y deja el postre súper cremoso. Si puedes usa de ese tipo frío que venden en la nevera del súper.
- Glaseado dulce: le va encima cuando sale del horno y pone el toque final azucarado justo perfecto.
Guía paso a paso
- Prepara el horno
- Pon el horno a calentar a 175 grados con calor arriba y abajo. Engrasa una bandeja bien amplia (tipo 23x33 cm) para que nada se quede pegado.
- Deja todo listo
- Los rollos los partes en cuatro con un cuchillo afilado, así crecen parejito. Trocea también las manzanas que estén bien escurridas, mientras más chico, más parejo.
- Mézclalo todo
- Mete los rollos cortados, los trozos de manzana y la crema batida en la bandeja, mezcla bien usando una cuchara grandota o con las manos, tú manda.
- Al horno
- Deja que todo se dore unos 30 a 35 minutos, la superficie tiene que quedar dorada y el pan bien inflado. Cada horno es su mundo, así que échale un ojo al color.
- Montar y disfrutar
- Saca la bandeja, espera cinco minutos que se asiente y así el glaseado se esparce mejor. Con todo todavía calientito, ve lanzando el glaseado por arriba y listo.

Las manzanas caramelizadas son lo mío. Siempre me llevan directo al olor de pastel en casa de mi abuela. Es mágico cuando toda la casa huele así, tienes el momento seguro de que estás volviendo a la niñez.
Cómo guardar sin problemas
Cuando salga del horno cúbrelo suavecito y directo al refri. Ahí aguanta dos o tres días fácil y sigue jugoso. Si quieres recalentarlo, con calentarlo apenas en el horno o darle un toque en microondas va que vuela.
Otras ideas de ingredientes
Si no hay manzanas enlatadas puedes usar frescas con un toque rápido de sartén, azúcar y mucha canela. También pruebe con peras que quedan top. Si se te acaba la nata, puedes cambiarla por un poco de crème fraîche o incluso queso crema para que le dé un giro diferente.

Ideas para presentar
Si lo sirves calientito con una buena bola de helado de vainilla no tiene rival. Un toque de chantilly o canela molida por encima no le cae nada mal. Y si tienes brunch, córtalo en cuadros chicos y ponlos en bandeja para que todos agarren su porción.
Un vistazo a su historia
Manzana y canela son todo un clásico de confort por aquí. La idea mezcla los rollos de canela clásicos y los pasteles de manzana de siempre, todo en una sola versión moderna que haces rapidísimo. Lo bueno de postres así es que puedes jugar con productos de temporada y pasarla bien creando nuevas versiones familiares.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Puedo usar manzana fresca en vez de frita?
Claro, pica la manzana en cubitos y dale una vuelta en la sartén antes de mezclarla con el bollo de canela.
- → ¿Cómo darle un toque más sabroso?
Antes de hornear, ponle un poco de canela o si quieres algo distinto, una pizca de nuez moscada por encima.
- → ¿Con qué acompaño mejor este postre?
Helado de vainilla, nata montada o fruta fresca quedan súper bien al lado.
- → ¿Cuánto aguanta en la nevera?
Dura un par de días refrigerado y si quieres puedes calentarlo un poco otra vez.
- → ¿Qué puedo usar si no tengo rollos de canela de lata?
Haz masa de pan dulce o prepara tus propios bollos de canela y córtalos en trozos pequeños.