
Este irresistible gratinado de gnocchis con Alfredo y pollo es puro apapacho en cada bocado. Los gnocchis suaves de papa se bañan en una cremosa salsa Alfredo casera y se mezclan con trocitos jugosos de pollo y una mezcla doble de quesos que se funden por encima. Es ese platillo sencillo de una sola sartén que transforma cualquier cena entre semana en algo especial sin pasar horas cocinando.
La primera vez lo preparé después de un día pesado porque necesitaba cenar algo rico sin complicarme y desde entonces siempre me lo piden cuando hay convivios o cenas familiares. Los gnocchis absorbiendo el toque de parmesano de la salsa es de otro nivel.
Ingredientes
- Mantequilla sin sal: da ese sabor mantequilloso y ayuda a que el ajo brille, usa la mejor que encuentres para resaltar el platillo
- Ajo fresco: le mete aroma y profundidad, los dientes frescos hacen mucha diferencia vs los que ya vienen picados
- Queso crema: espesa y deja la salsa muy suave, sácalo antes para que alcance temperatura ambiente y se derrita bien
- Crema para batir: justo la que usan en restaurantes para esa textura sedosa, busca que sea pura sin ingredientes raros
- Caldo de pollo bajo en sal: suma sabor sin pasarse de salado todo
- Gnocchis de papa: son suaves y perfectos para llenarse de salsa, usa los frescos si puedes pero los que no van en frío también quedan
- Pollo cocido: llena más y hace el platillo completo, si tienes pollo rostizado o del día anterior es ideal
- Parmesano rallado recién: da ese sabor nuez y especial, si puedes rállalo justo antes para que funda y sepa espectacular
- Queso mozzarella: cubre el platillo con una capa tipo pizza que se estira, usa el de leche entera si quieres que derrita más
- Sal y pimienta negra recién molida: ajusta todo, prueba antes de añadir porque los quesos también tienen sal
Sencillos Pasos a Seguir
- Deja Listos los Ingredientes:
- Saca el queso crema del refrigerador una hora antes de empezar, necesita estar súper blandito, si olvidaste ponlo en microondas unos segundos. Así no te quedan grumos. Prende tu horno a 190°C (375°F) y pon la parrilla arriba para que dore mejor.
- Arranca la Salsa:
- Derrite la mantequilla en sartén amplia a fuego medio-alto. Cuando quite espuma, echa el ajo picado y mueve por medio minuto hasta que suelte su olor. Así la mantequilla agarra el sabor sin que el ajo se queme.
- Hazlo Cremoso:
- Agrega el queso crema suavizado en pedacitos, después la crema y el caldo de pollo. Remueve por unos cuatro o cinco minutos cuidando que el queso se funda todo y quede parejo, no dejes que hierva para que no se corte.
- Mezcla Gnocchis y Pollo:
- Pon los gnocchis crudos y el pollo cocido directo a la salsa, mezcla bastante para que se empapen. Solo deben tomar color, no cocerse aún.
- Extra de Parmesano:
- Añade la mitad del parmesano rallado, mueve hasta que comience a derretirse y ya, saca la sartén del fuego para no pasarlo de cocción.
- Pásalo a la Charola y Añade Queso:
- Pasa todo a un refractario grande (23x33 cm), nivela y encima pon el parmesano sobrante y luego toda la mozzarella repartida para hacer costra de queso.
- Hornea Hasta que Burbujee:
- Mete al horno sin tapar y déjalo 25–30 minutos, que el queso quede dorado y el borde burbujeando, busca que todo se derrita y la salsa se espese un poco.
- Deja Reposar y Prueba:
- Cuando salga no sirvas en seguida, espera unos cinco minutos para que la salsa espese y los sabores se mezclen. Prueba y si lo ves necesario pon más sal o pimienta.

Todavía me sorprende cómo con ingredientes sencillos que cualquiera tiene y pocos minutos al fuego puedes lograr tanto sabor. No hay nada como ver a la familia feliz agarrando ese primer trozo con queso burbujeante recién salido del horno.
Cómo Guardarlo
Si te sobra, guárdalo tapado en el refri hasta tres días. Para recalentarlo, ponlo en microondas u horno y échale tantito caldo o leche para que la salsa quede otra vez suave. No congeles si no lo has horneado, porque los gnocchis cambian de textura.
Opciones de Ingredientes
Puedes hacer la salsa más ligera usando mitad crema y mitad leche. Si no quieres lácteos, prueba crema vegetal y quesos sin leche. El pollo rostizado funciona súper bien, pero también queda rico si usas pavo cocido.
Formas de Servirlo
Sírvelo junto a una ensalada verde o brócoli al vapor si quieres agregar verduras. Un pan de ajo o focaccia lo llevan a otro nivel, y si es ocasión especial, ponle parmesano extra o hierbas frescas arriba justo antes de servir.

Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué hago para que el queso crema no quede con grumos?
Asegurate de que el queso crema esté realmente blando antes de meterlo en la sartén. Anda mezclando sin parar mientras se derrite y así la salsa queda bien lisa.
- → ¿Se pueden usar gnocchis que ya vienen cocidos?
Los gnocchis crudos son mejor opción porque agarran el sabor cuando se hornean. Si no tenés, se pueden usar cocidos, solo que van a quedar mucho más blandos.
- → ¿Puedo cambiar el pollo por otra cosa?
Claro, un pavo cortadito o unos champiñones salteados quedan bárbaros y cambian un poco el sabor. ¡Queda genial!
- → ¿Qué quesos van mejor arriba?
El parmesano da ese toque salado y el mozzarella se derrite y se estira. Así todo dorado y burbujeante por encima queda insuperable.
- → ¿Cómo evito que la salsa salga líquida?
No tapes la bandeja al hornear y después de sacarla dejá reposar un rato. Así la salsa espesa sola.
- → ¿Por qué es bueno dejar reposar el plato antes de servir?
Cuando lo dejás reposar, la salsa se pone más firme y los sabores se combinan mejor. Así cada porción sale todavía más cremosa.