
Cuando quiero algo súper goloso y sé que a todos les va a encantar, siempre pienso en un cheesecake de chocolate oscuro con frambuesa. Cada bocado es pura cremosidad, con frambuesas frescas y chocolate, cubierto por una capa brillante de ganache. Luce increíble en la mesa y es perfecto para fiestas o cuando sólo quieres darte un gran gusto. En mi casa siempre hay quien pelea por el último trozo.
He preparado esto para cumples y fiestas, y ahora mis primos no pueden dejar de pedírmelo. La primera vez que lo llevé, desapareció tan rápido que ni me dejaron esconder un trozo.
Jugosos Ingredientes
- Mantequilla sin sal derretida: Da ese toque mantecoso a la base. Si puedes, busca mantequilla europea de buena calidad.
- Galletas tipo Oreo de chocolate: Tritúralas bien para hacer la base. Elige las que huelan bastante a cacao, no uses si están viejas.
- Frambuesas frescas: Van dentro y arriba para que cada mordisco tenga jugo. Compra las que veas más gorditas y de color intenso.
- Polvo de espresso: Realza el chocolate, pero no se nota como café. Usa uno bien fino, especial para hornear.
- Azúcar blanca: Le da dulzura y estructura. Si puedes, escoge la orgánica para que sepa más limpio.
- Chocolate semi amargo troceado: La base para el relleno y la ganache. Usa uno sobre 60% cacao para balance perfecto.
- Azúcar moreno claro compacto: Humedece el relleno y da saborcito a caramelo suave.
- Huevos grandes a temperatura ambiente: Son clave para que cuaje bien. Los huevos fresquitos dan mejor textura.
- Cacao tipo Dutch oscuro: Le sube el nivel al chocolate. Busca uno bien negro para que parezca de pastelería clásica.
- Nata para montar a temperatura ambiente: Logra la textura cremosa del relleno y la ganache. Siempre usa la de más grasa.
- Extracto de vainilla: Redondea todos los sabores. Mejor natural, nada de imitación.
- Yemas de huevo: Más cremosidad y suavidad. Si el huevo es recién comprado, mejor aún.
- Queso crema entero y suave: Lo que hace al relleno super untuoso. Compra el de bloque, no los que vienen batidos.
- Para la ganache: Más chocolate, nata y mantequilla sin sal. Usa cosas frescas y buenas, igual que arriba.
- Cacao, salsa de chocolate y más frambuesas para decorar: Siempre usa lo mejor que encuentres, así queda de restaurante.
Divertidos Pasos
- Corta y Decora:
- Calienta un cuchillo fino bajo agua caliente y pásale un trapo antes de cada corte. Sirve con salsa de chocolate, más frambuesas frescas o una lluvia de cacao si te animas. Guarda las sobras bien tapadas en la nevera.
- Pon la Ganache:
- Extiende la ganache ya más fría y espesa sobre el cheesecake helado, usando una espátula de las de pastelería. Déjala reposar a temperatura ambiente sobre la tarta una horita.
- Haz la Ganache:
- Pon el chocolate picado para la ganache en un bol. Calienta la nata hasta que casi burbujee y échala sobre el chocolate. Espera un minuto y bate hasta suave. Mezcla la mantequilla en cubos hasta que se derrita y listo. Deja enfriar un poco para que tome cuerpo.
- A la Nevera Toda la Noche:
- Deja el cheesecake ya frío, dentro del molde, varias horas en la nevera (mínimo seis). Así se corta mejor y el sabor está a tope.
- Enfría y Desmolda:
- Saca la tarta del baño María, quita algo del aluminio para que salga el vapor, y pasa un cuchillito cerca del borde por dentro para que no reviente. Déjala enfriar totalmente.
- Hornea con Baño María:
- Pon el molde envuelto en una bandeja más grande y vierte agua bien caliente alrededor hasta que suba unos dos dedos. Hornea a 165°C unos 70 minutos. El centro debe moverse un poquito pero sin estar líquido.
- Pon las Capas:
- Vierte la mitad del relleno sobre la base fría, reparte las frambuesas por encima y tapa con el resto del relleno cubriéndolas todas.
- Agrega el Chocolate:
- Agrega la mezcla de chocolate y espresso derretido al queso crema. Mezcla despacito hasta que quede todo muy parejo.
- Suma huevos y nata:
- Agrega los huevos y las yemas de a uno, apenas mezclando cada vez. Luego echa la nata y la vainilla sin dejar de batir. Dale unos segundos más hasta tener una crema, pero no te pases batiendo.
- Mezcla Queso Crema:
- Echa el queso crema suave en la procesadora y deja que quede super liso, unos dos minutos. Limpia los bordes. Agrega los dos azúcares y el cacao. Mezcla hasta que esté bien integrado.
- Derrite Chocolate y Café:
- Calienta agua en una olla y pon encima un bol (sin que toque el agua). Añade el chocolate y el espresso en polvo. Revuelve hasta que esté liso y derretido. Manténlo tibio.
- Hornea la Base:
- Lleva la base al horno a 175°C por diez minutos. Después déjala enfriar en una rejilla y baja el horno a 165°C.
- Haz la Base:
- En un bol grande, mezcla las galletas trituradas con la mantequilla derretida calentita. Presiona bien en el fondo del molde y un poquito en los lados, usando las manos o una taza.
- Prepara el Molde:
- Envuelve un molde desmontable de 23 cm en varias capas de aluminio grueso para que no se cuele agua. Unta mantequilla por dentro y enciende el horno a 175°C.

La parte que más me encanta es la ganache de arriba. Siempre guardo un poco más para bañar mi trozo. Mi sobrinita dice que es su "tarta de los deseos de cumpleaños" porque ella siempre se come la primera frambuesa.
Consejos Para Guardar
Mantén tu cheesecake tapado o en un tupper en la nevera hasta cinco días. Si quieres que dure más, puedes congelar cada porción por separado y dejar que se descongele en la nevera la noche antes. Si vas a poner frambuesas encima, hazlo el mismo día para que no pierdan color ni jugo.
Cambios de Ingredientes
Puedes reemplazar el chocolate semi dulce por uno amargo, solo añade otra cucharadita de azúcar si prefieres bien dulce. Para hacerlo sin gluten usa galletas de chocolate sin gluten. También puedes poner un poco de mascarpone en vez de parte del queso crema y el sabor será más ligero.
Opciones Para Servir

Me encanta servir los triángulos con un poco de nata montada y un toque de salsa extra de frutos rojos. Si es para una reunión grande, puedes hornear porciones pequeñitas usando moldes individuales. Así todos quedan contentos con su mini cheesecake.
Notas Curiosas e Historia
El clásico postre de Nueva York toma una vuelta de tuerca aquí, mezclando la base de queso crema tradicional con cacao y frambuesas. Al combinar fruta fresca y chocolate intenso, este postre es un mix de tradiciones americanas y europeas, perfecto para compartir en días especiales con amigos y familia.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Cómo consigo que quede bien cremoso?
Deja que el queso, los huevos y la nata estén a temperatura ambiente. Mezcla bien todo, pero cuando pongas los huevos, bate lo justo y listo.
- → ¿Para qué sirve el baño María?
Ayuda a que el pastel cocine lento y parejo, así no se raja y queda con textura súper suave.
- → ¿Puedo usar frambuesas congeladas?
Sí, nada más descongélalas bien y quítales toda el agua para que no eche a perder el relleno.
- → ¿Cuánto tiempo debe enfriar antes de cortarlo?
Mínimo unas 6 horas en la nevera o, mejor, toda la noche para cortarlo perfecto y que quede firme.
- → ¿Qué chocolate va mejor para la ganache?
Lo ideal es uno semi-amargo de entre 55% y 70% de cacao, así quedará rico y brillante.
- → ¿Se puede hacer sin procesador?
Claro, puedes usar licuadora, batidora normal o de mano, y así se mezcla todo parejo.