
Las bolitas de puré con queso son mi truco favorito cada vez que sobran papas en la nevera. Al hornearlas, quedan crujientes, doraditas y llenas de sabor a queso. Lo mejor es que nadie se da cuenta que son restos y en las fiestas se acaban en minutos. Si te quedan, al día siguiente saben igual de ricas, listas para almorzar rápido o acompañar la cena.
Las hice por primera vez para una noche de pelis en familia porque quería algo sencillo pero distinto. Desde entonces, cada vez que hay sobras de puré mis hijos las piden en todas las fiestas o fechas especiales.
Sabrosos Ingredientes
- Puré de papas: Tres tazas Si está frío y de ayer, queda más firme y crocante
- Queso rallado: Una taza El cheddar o mozzarella se funden muy bien Elige uno entero y rállalo en casa, así queda más rico
- Queso parmesano: Dos cucharadas Le da ese toque especial con sabor fuerte Usa del que viene bien finito para mezclarse fácil
- Harina de trigo normal: Un cuarto de taza Ayuda a que no se desarmen y queden con cuerpo Si tienes que evitar el gluten usa tu mezcla segura favorita
- Cebollín fresco: Dos cucharadas Lo verde les da color y un saborcito fresco Que estén bien firmes y de color vivo indica que están buenos
- Crema ácida: Un tercio de taza Deja la mezcla suave y más cremosa Si puedes, usa la entera
- Sal: Solo la necesaria para que resalten los sabores Prueba antes y ajusta si crees que falta
- Huevos: Dos Batidos para que todo se junte bien Si tienes huevos grandes mejor
Súper Sencillos Pasos
- Hornea hasta que estén doraditas
- Mete la charola en el horno ya precalentado a 400°F Déjalas de veinte a veinticinco minutos Cuando las veas doradas arriba y se despeguen fácil sabes que están listas
- Mide y prueba antes de hornear
- Prueba la mezcla y agrega sal si crees que le falta Llena cada hueco del molde con una cuchara grande, solo hasta tres cuartos para que tengan espacio de inflarse
- Agrega el puré con cuidado
- Echa el puré a la mezcla de huevo y mueve con una espátula hasta que se mezcle bien pero no lo batas de más para que no se ponga muy pegajoso Que quede con algo de textura
- Mete los quesos y lo verde
- Revuelve el queso rallado, el parmesano y el cebollín hasta que todo quede repartido por toda la mezcla
- Haz la base cremosa
- En un bol grande, bate bien los huevos y la crema hasta que todo esté parejo Sin líneas ni grumos, eso hace el puré más ligero
- Deja enfriar y sirve
- Espera un poco para poder sacarlas del molde sin quemarte Después usa un cuchillo o espátula pequeña y disfrútalas calientes, solas o con tu dip favorito

El parmesano no puede faltar para mí porque cambia todo el sabor. Una vez las preparé con restos de puré del Día de Acción de Gracias y redescubrí lo divertido que es convertir unas papas comunes en algo que nadie deja en el plato.
Cómo guardar
Guarda las bolitas en un recipiente tapado en la nevera hasta tres días. Para que queden crocantes al recalentarlas, usa horno o tostadora. ¿Quieres que duren más? Congélalas separadas y ya después pásalas a una bolsa cerrada. Al querer comerlas hornéalas congeladas directo y listo.
Cambios de ingredientes
Puedes usar los quesos que tengas como Gruyere si quieres un sabor más fuerte o queso sin lactosa si lo necesitas. Si eres celíaco, una mezcla sin gluten funciona igual que la normal. Ah, y puedes agregarle hierbas picadas extras o verduras para que lleven más color.

Ideas para servirlas
Prueba estas bolitas acompañando pollo rostizado o carne asada que quedan de lujo. También son buenísimas con dips como crema ácida, yogurt griego con hierbas o un poco de sriracha. A los niños les encantan con ketchup o aderezo ranch, vuelan de la mesa en minutos.
De dónde salió la idea
En muchos países, estas bolitas muestran cómo aprovechar lo que quedaba. Después de fiestas o domingos grandes, en Europa, suelen armar botanas así con lo que hay a mano. Nada como volver a disfrutar del puré de ayer convertido en una alegría nueva.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Con qué queso quedan mejor estos bocaditos?
El cheddar y la mozzarella van increíble, pero también podés probar Gouda, Gruyère o armar tu propia mezcla si te gusta jugar con los sabores y la textura fundente.
- → ¿Se pueden hacer sin gluten?
Sí, cambiá la harina común por harina sin gluten y salen igual de crocantes. Perfecto si estás cuidando la dieta.
- → ¿Por qué usar puré frío?
Si usás el puré recién sacado de la heladera, la mezcla queda más compacta y es mucho más fácil que no pierda la forma al hornear. El resultado tiene mejor textura.
- → ¿Cómo quedan extra crujientes?
Agregales pan rallado por encima antes de hornearlas o dejalas un rato más en el horno para que salga esa capa dorada y crocante que tanto gusta.
- → ¿Puedo dejarlas listas con anticipación?
¡Claro! Se guardan genial y están incluso más ricas al día siguiente. Sólo calentá en el horno y quedan como recién horneadas.