
Este pastel de frambuesa y chocolate blanco es ese antojo digno de pastelería que hago tanto para festejos como para esos domingos en casa. El resultado de mezclar el chocolate blanco cremoso con frambuesas ácidas no tiene comparación y más en una miga tan suave. Si buscas algo especial sin líos, este dulce nunca me falla.
Aún me acuerdo de llevar este pastel a un picnic con la familia – voló en segundos y cada mordisco sabía a verano. Desde entonces lo horneo para cumpleaños, desayunos y findes en casa y siempre gusta igual.
Sabrosos Ingredientes
- Mantequilla sin sal: usa una mantequilla buena para que el sabor y la textura sean inmejorables:
- Azúcar blanca fina: da una miga suave y endulza de forma uniforme
- Harina leudante: deja la miga esponjosa; elige una marca fiable
- Huevos medianos: sácalos antes de la nevera para que esponjen mejor y se mezclen fácil
- Frambuesas frescas: queden firmes pero maduras para que exploten en boca
- Chips o trozos de chocolate blanco: mejor si tiene alto contenido de manteca de cacao porque así funden y saben más rico
- Azúcar glas: tamízala para un glaseado sin grumos
- Chocolate blanco para decorar: funde despacio cualquier tableta cremosa y quedará de diez
- Frambuesas frescas extra: coronan y refrescan con su color y sabor
- Frambuesas liofilizadas: salpica para un toque ácido y un look bonito
- Chips blancos para decorar: añade textura y un acabado chulo
Fáciles Pasos a Seguir
- Decora y enfría:
- Deja que se enfríe unos diez minutos en el molde y pásalo a una rejilla para que termine de enfriarse – así no se derrite la cobertura.
- Horneado:
- Pasa la mezcla al molde forrado y alisa la parte de arriba. Hornea entre cincuenta y cinco y sesenta y cinco minutos. Si al pinchar el centro no sale masa, está listo.
- Mezcla frambuesas y choco:
- Agrega con suavidad el chocolate blanco y las frambuesas usando una espátula. No remuevas mucho para que no se rompan ni se vayan al fondo.
- Haz la masa:
- Incorpora los huevos y la harina a la mantequilla y el azúcar. Mezcla solo hasta que esté todo bien unido para que no se ponga duro.
- Bate mantequilla y azúcar:
- Bate la mantequilla sin sal con el azúcar blanca hasta que esté muy aireada y blanquita, unos cuatro minutos. Así queda base esponjosa.
- Prepara molde y horno:
- Cubre un molde tipo plum cake (dos libras) con papel de horno para que sea fácil desmoldar. Calienta el horno a la temperatura para que todo cueza por igual.
- Cubre con chocolate blanco:
- Derrite chocolate blanco suave, enfría y resérvalo. Mientras bate mantequilla blanda y azúcar glas, mezcla con el choco frío y sigue batiendo hasta que quede muy cremoso.
- Decora súper fácil:
- Pon la crema en una manga pastelera con la boquilla que te guste y haz líneas o remolinos por arriba. Añade un montón de frambuesas frescas, encima frambuesas secas y decora con chips de chocolate blanco por fuera.

Para mí, las frambuesas frescas hacen toda la diferencia. Su puntito ácido en cada bocado alegra mucho y siempre me recuerda cuando salíamos a recolectarlas en familia de peque. No falla en transportarme ahí al mezclarlas con la masa.
Cuidados para Guardar
Este pastel aguanta perfecto en un tupper a temperatura ambiente hasta dos días (mejor si está sin cobertura). Con el glaseado, mételo a la nevera. Saca las porciones para que se templen antes de comer, así están más ricas. También puedes congelarlo hasta dos meses – solo envuélvelo bien sin glasear y descongela antes de decorar.
Cambios de Ingredientes
¿No tienes harina leudante? Haz la tuya mezclando harina común con levadura química. Si no consigues frambuesas frescas, usa congeladas echándolas directas para que no suelten tanto color. Una margarina vegana sin lácteos también va bien para quien lo necesite.
Ideas para Servirlo
Córtalo gordito para una sobremesa o en trocitos pequeños para tomar con té. Va de lujo con una taza de café fuerte o uno de té. Si lo quieres muy especial, calienta una rebanada y añádele una bola de helado de vainilla encima.

Un Poco de Historia
El combo de chocolate blanco con frambuesa es ya un clásico moderno en la repostería. El dulzor suave del chocolate y la chispa de las frambuesas se llevan genial. En Inglaterra los bizcochos tipo pan nunca faltan en la merienda, y este lleva esa tradición a otro nivel con color y fruta.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Cómo hago para que las frambuesas no se vayan al fondo?
Espolvorea un poco de harina sobre las frambuesas antes de mezclarlas. Así se quedan mejor repartidas mientras se hornea todo.
- → ¿Puedo poner frambuesas congeladas?
Sí, pero échalas directamente del congelador, sin descongelar. Así no sueltan el color y no manchan la masa.
- → ¿Cómo logro que la buttercream de chocolate blanco quede suave?
Deja que el chocolate blanco derretido se enfríe un poco antes de ponerlo en la crema. Bate hasta que quede bien liso y sin grumos.
- → ¿Cómo sé si el bizcocho ya está hecho?
Mete un palillo o brocheta en el centro; si sale limpio o sólo con miguitas húmedas, ya está listo.
- → ¿Puedo prepararlo con antelación?
Sí, una vez frío, guárdalo tapado. Pon la deco justo antes de comer si quieres que quede fresco.
- → ¿Dónde guardo los restos?
Deja los trozos en un recipiente cerrado a temperatura ambiente hasta dos días, o mételos en la nevera si ya tiene la crema.