
Estos bomboloni esponjosos son el alma de la cultura del café italiana. Se suelen rellenar en caliente y servir enseguida. Cada vez que los frío, llena la casa un olor a panadería y todos llegan curiosos a ver qué hay de bueno en la mesa.
La primera vez no estaba segura si iban a quedar tan suaves como los que probé en Florencia. Dejé que subiera bien la masa y me transportó directo a las vacaciones. Volaron en un segundo.
Ingredientes
- Harina de trigo: la base que da textura, mejor usa tipo 405 que hace la masa liviana
- Levadura seca: es lo que hace que la masa suba, disuélvela bien en leche tibia
- Azúcar: añade dulzor y le da ese tono doradito al freír
- Huevos grandes: ayudan a mezclar bien todo y la masa queda suave, sácalos antes del refri
- Leche entera: aporta un punto jugoso y hace crecer la masa, caliéntala un poco para activar la levadura
- Mantequilla blanda: deja la masa suave, solo tienes que asegurarte de que esté tierna
- Relleno al gusto: lo clásico es crema pastelera, mermelada o chocolate, los de fruta añaden un toque fresquito
- Azúcar glass: ese toque final tan rico y típico después de freírlos
- Aceite para freír: usa aceite neutro de alto punto de humo como girasol o canola para que se doren parejo
Divertida guía paso a paso
- Activa la levadura:
- Mezcla la levadura con la leche tibia y déjala reposar unos cinco minutos hasta que haga una espumita. Así sabes que va a levantar bien.
- Prepara la masa:
- Ponlo todo junto: leche con levadura, azúcar, harina, huevos y mantequilla blanda. Comienza despacito y amasa por diez minutos hasta que no se pegue y esté elástica. Es clave para que después queden bien aireados.
- Primer levado:
- Coloca la masa en un bol engrasado, tápala y déjala reposar en sitio cálido. Tiene que doblar su tamaño, suele llevar una hora. Sin prisa la textura mejora mucho.
- Forma los bomboloni:
- Estira la masa a unos dos centímetros y medio de grosor, saca círculos con un vaso y ponlos sobre papel. Cúbrelos flojito y deja que suban otra vez hasta que casi doblen.
- Fríe los bomboloni:
- Calienta el aceite (busca unos 170-175 grados) en olla grande. Echa de a pocos los círculos y fríelos por lado unos dos minutos, hasta dorar. Sácalos y ponlos sobre papel para que escurran.
- Rellena y disfruta:
- Con una manga pon el relleno que prefieras cuando ya estén fríos. Revuélcalos suavemente en azúcar glass y cómelos aún tibios, es cuando más ricos están.

Curiosidades útiles
Siempre usa leche templada porque si está fría la levadura no sube bien. Amasa el tiempo que haga falta para lograr una miga fina y esponjosa. Los bomboloni están geniales recién hechos o unas horas después cuando todavía crujen. Me la paso usando crema de vainilla, porque se combina increíble con la masa suave y me recuerda a mi abuela con su cocina pequeñita y el olor a dulce por toda la casa.

Consejos para guardar
Comételos mejor el mismo día, pero si te sobran, espera a que se enfríen y guárdalos bien cerrados al aire. Al día siguiente pierden ese toque fresco, pero los puedes calentar un poco en el horno suave y ¡listo!
Cambia los ingredientes si quieres
Puedes rellenarlos con crema de pistacho o de avellanas en vez de la típica de vainilla. Si prefieres menos dulce, prueba mermeladas ácidas como la de albaricoques o frambuesa. Si no quieres usar harina de trigo, la de espelta tipo 630 también va muy bien.
Ideas para presentar
Coloca los bomboloni en una bandeja bonita y échales azúcar glass justo antes de servir. Sorprenden aún más con rellenos coloridos y frutas frescas de adorno. Junto con un café o un espresso, dejan ver todo su sabor auténtico.
Historia y tradición
Muy populares en la comida callejera de Italia, los bomboloni son originarios de la Toscana. Hoy son comunes en cualquier mercado o cafetería y para desayunar o a media tarde van perfectos. Antes eran típicos en carnavales, justo antes de la Cuaresma.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué rellenos quedan bien para bomboloni?
La vainilla, el chocolate o una mermelada de fruta quedan geniales. ¡No dudes en probar ideas nuevas!
- → ¿Cómo lograr que la masa salga bien?
Amasa bastante y dale tiempo para que suba. Así te van a salir súper suaves y esponjosos.
- → ¿Por qué cuidar la temperatura del aceite?
Si el aceite está a 170–175 °C quedan doraditos, se cocinan por dentro y no se queman por fuera.
- → ¿Se pueden hacer sin relleno?
¡Sin problema! Quedan riquísimos solos y puedes bañarlos en azúcar cuando los saques del aceite.
- → ¿Cómo se mantienen frescos los bomboloni?
Lo mejor es comerlos recién hechos, pero si sobran, guárdalos bien tapados, máximo un día.