
Esta delicia de tortellini estilo cheesesteak con salsa cremosa de provolone fusiona los sabores clásicos del sándwich de Filadelfia con bolsitas de pasta tierna, creando una cena exquisita que satisface cualquier antojo de comida reconfortante. La suntuosa salsa une todos los elementos en un plato que resulta familiar y emocionante a la vez.
Inventé esta receta durante un invierno particularmente frío cuando mi familia ansiaba algo sustancioso pero diferente a nuestra rotación habitual de pastas. En el momento que el aroma del bistec salteado con pimientos llenó la cocina, supe que teníamos un nuevo favorito en casa.
Ingredientes
- 1 libra de tortellini de queso: frescos refrigerados para mejor textura y cocción más rápida
- 1 libra de bistec ribeye: cortado finamente contra la fibra para máxima suavidad
- 2 cucharadas de aceite de oliva: de buena calidad para mejor sabor
- 1 cebolla amarilla grande: en rodajas finas para una caramelización adecuada
- 1 pimiento verde: en tiras delgadas para un auténtico sabor de cheesesteak
- 3 dientes de ajo: picados para infundir profundidad aromática a la salsa
- 1/2 taza de caldo de res: preferiblemente bajo en sodio para controlar la sal
- 1 taza de crema espesa: crea la base lujosa para la salsa
- 1 1/2 tazas de queso provolone: rallado de un bloque en lugar de pre-rallado para un derretido más suave
- 1/4 taza de queso parmesano: recién rallado para complejidad de sabor
- 2 cucharadas de perejil fresco: picado para frescura y color
- Sal y pimienta negra al gusto: para sazonar durante la cocción
Instrucciones paso a paso
- Preparar la pasta:
- Pon a hervir una olla grande con agua bien salada a fuego medio-alto. Cocina los tortellini según las instrucciones del paquete hasta que estén al dente, normalmente 3-5 minutos. Ten cuidado de no cocinarlos demasiado ya que seguirán cocinándose un poco en la salsa después. Escúrrelos bien pero no los enjuagues para que la salsa se adhiera mejor.
- Sellar la carne:
- Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto hasta que brille pero sin que humee. Añade el ribeye en rodajas finas en una sola capa sin amontonarlas. Cocina sin remover durante unos 2 minutos, luego revuelve y continúa cocinando por 1-2 minutos más hasta que estén doradas con un poco de rosado. La carne terminará de cocinarse cuando regrese a la salsa. Retírala a un plato y cúbrela para mantenerla caliente.
- Saltear las verduras:
- En la misma sartén con los jugos de carne, añade las cebollas y pimientos en rodajas. Cocínalos por 5-6 minutos, revolviendo ocasionalmente, hasta que comiencen a ablandarse y desarrollar bordes dorados. La ligera caramelización añade un dulzor esencial para equilibrar la salsa. Agrega el ajo picado durante el último minuto, revolviendo constantemente para evitar que se queme mientras libera sus aceites aromáticos.
- Crear la base de la salsa:
- Vierte el caldo de res en la sartén, usando una cuchara de madera para raspar todos los sabrosos trozos dorados del fondo. Este paso incorpora el máximo sabor a tu salsa. Deja que el caldo hierva por 2-3 minutos hasta que se reduzca ligeramente, concentrando los sabores.
- Desarrollar la salsa cremosa de queso:
- Baja el fuego antes de añadir la crema para evitar que se corte. Revuelve continuamente mientras la salsa comienza a espesar, unos 2-3 minutos. Agrega gradualmente el queso provolone rallado, revolviendo constantemente para asegurar un derretido suave sin grumos. Una vez totalmente incorporado, mezcla el queso parmesano hasta que la salsa quede sedosa y uniforme.
- Combinar y terminar:
- Devuelve la carne cocinada a la sartén, junto con sus jugos acumulados. Incorpora suavemente los tortellini escurridos, con cuidado de no romper la pasta. Deja que todo hierva a fuego lento durante 2-3 minutos hasta que se caliente por completo y los tortellini absorban algo del sabor de la salsa. Retira del fuego y termina con perejil fresco para dar brillo y contraste de color.

El queso provolone es verdaderamente el ingrediente estrella aquí. Descubrí tras muchas pruebas que usar provolone recién rallado en lugar de preenvasado crea una salsa bastante más suave. Mi hija una vez proclamó que esta pasta era mejor que los auténticos cheesesteaks después de probarla por primera vez, y considero eso mi mayor logro culinario hasta la fecha.
Preparación adelantada y almacenamiento
Este tortellini estilo cheesesteak puede prepararse hasta con 3 días de anticipación y guardarse en un recipiente hermético en la nevera. La salsa se espesará considerablemente al enfriarse, así que al recalentar, añade un chorrito de leche o caldo y calienta suavemente a fuego medio-bajo. Revuelve con frecuencia para evitar que la salsa de crema se queme. A menudo hago doble cantidad específicamente para tener sobras planeadas para noches ocupadas entre semana.
Combinaciones perfectas
Sirve este sustancioso plato de pasta con una ensalada crujiente aliñada con vinagreta de limón para equilibrar la salsa cremosa. El pan de ajo es un excelente acompañamiento para mojar cualquier resto de salsa. Para bebidas, un vino tinto de cuerpo medio como el Sangiovese corta maravillosamente la riqueza, mientras que una cerveza artesanal fría complementa los sabores del cheesesteak para una combinación más informal.
Opciones de personalización
Esta versátil receta acepta muchas variaciones basadas en tus preferencias. Los champiñones son una excelente adición cuando se saltean con los pimientos y cebollas. Para los amantes del picante, añade hojuelas de chile o pimientos cherry picantes para imitar las variaciones picantes del cheesesteak. Sustituye la carne por pollo para crear una versión más ligera, o usa raviolis de queso en lugar de tortellini para una experiencia de textura diferente.

Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué puedo usar en lugar de lomo de res para este plato?
Si no encuentras lomo, puedes usar solomillo, falda, o incluso trozos finos de aguja. Para mejores resultados, corta cualquier carne muy finamente a contrafibra. En apuros, la carne molida funciona bien, aunque la textura será algo diferente del plato original.
- → ¿Puedo preparar este plato con anticipación?
Sí, pero para mejores resultados, prepara la salsa y la mezcla de carne antes pero cocina los tortellini frescos justo antes de servir. Cuando vayas a comer, calienta suavemente la mezcla de salsa y luego mézclala con la pasta recién hecha. Si necesitas preparar todo el plato antes, cocina los tortellini un poco menos, ya que seguirán cocinándose al recalentarse.
- → ¿Qué tipo de tortellini va mejor con este plato?
Los tortellini rellenos de queso o carne complementan este plato maravillosamente. Los tortellini frescos ofrecen la mejor textura, pero las opciones congeladas o refrigeradas de buena calidad también funcionan bien. Para una variación interesante, prueba tortellini rellenos de queso para una doble experiencia con la salsa de provolone.
- → ¿Cómo puedo hacer este plato menos pesado?
Para aligerar el plato, cambia la crema por leche semi o entera. También puedes reducir un poco la cantidad de provolone y parmesano. Añadir más caldo de res y menos crema crea una salsa más ligera sin perder sabor. Considera incluir más pimientos y cebollas para aumentar la proporción de verduras.
- → ¿Qué acompañamientos van bien con Tortellini de Bistec?
Este contundente plato combina muy bien con guarniciones ligeras como una ensalada verde con vinagreta, espárragos asados o brócoli al vapor. Pan de ajo o una baguette crujiente son geniales para mojar en la rica salsa. Para una comida completa que equilibre lo sustancioso, sirve porciones más pequeñas junto con guarniciones de verduras.
- → ¿Puedo congelar las sobras de Tortellini con Bistec?
Aunque es posible, los platos de pasta con crema no suelen congelarse bien ya que la salsa puede separarse y la pasta volverse blanda al descongelarse. Si necesitas congelarlo, hazlo en recipientes herméticos hasta por 1 mes. Recalienta suavemente a fuego lento con un chorrito de crema o leche para reconstitur la salsa.