
El Pan de Plátano con Coco y Piña es como unas mini vacaciones tropicales para tu cocina. De inmediato perfuma todo con ese aroma delicioso y alegre. Cada mordida trae coco cremoso, piña jugosa y el dulzor del plátano en un bizcocho súper suave. Cuando sobran plátanos y queremos darnos un gusto, este pan es el que más nos alegra el día.
En la primera vez que lo horneé, mi familia no podía dejar de pellizcar pedacitos mientras enfriaba. Ahora es nuestro favorito para desayunos durante las vacaciones de verano.
Sabrosos Ingredientes
- Plátanos maduros: le dan dulzura natural y mucha humedad. Busca los que estén bien amarillos y con algunas manchitas marrones para que tengan más sabor.
- Leche de coco entera: hace que el pan quede cremosito y con sabor fuerte a coco. Sacude bien la lata antes de abrirla y mejor usa la versión completa, no la ligera.
- Trozos de piña: agregan pedacitos ácidos y jugosos. La piña fresca queda espectacular si está bien madura, pero la de lata (en su jugo y bien escurrida) también funciona perfecto.
- Harina de trigo común: es la que le da cuerpo. Si tienes harina sin blanquear le da un sabor más casero.
- Azúcar granulada: equilibra lo tropical y mezcla súper bien si usas una fina y orgánica.
- Bicarbonato de sodio: hace que el pan suba y quede esponjoso.
- Sal: realza todos los sabores. Prefiere sal tipo kosher si puedes.
- Huevos grandes: le dan riqueza y juntan todo. Sácalos antes del refri para que estén a temperatura ambiente y así te sale mucho más suavecito.
Fáciles Pasos a Seguir
- Deja que se Enfríe:
- Saca el pan del horno cuando esté listo y déjalo reposar al menos quince minutos en el molde antes de desmoldar. Disfruta las rebanadas cuando aún estén tibias.
- Hornea el Pan:
- Pasa la mezcla a tu molde preparado. Alisa la superficie y dale un golpecito suave sobre la mesa para sacar burbujas de aire. Hornéalo unos sesenta minutos, checando con un palillo a los cincuenta y cinco. Si sale casi limpio y la superficie está dorada, está listo.
- Mezcla Coco y Piña:
- Con cuidado, agrega el coco rallado y los trozos de piña, mezclando suavemente para que no se deshagan y el batido quede aireado.
- Junta Todo:
- Añade la mezcla seca poco a poco a los ingredientes húmedos. Hazlo de manera envolvente y despacio, sólo hasta que veas que no queda casi harina. Deja algunas rayitas si quieres, no pasa nada.
- Combina Ingredientes Secos:
- En otro bowl, bate la harina junto al azúcar, sal y bicarbonato de sodio. Asegúrate de que todo esté mezclado lo más parejo posible.
- Junta los Húmedos:
- Agrega los huevos y la leche de coco a tu puré de plátanos. Bate despacio hasta que tenga un color amarillo clarito y quede cremosa la mezcla.
- Tritura los Plátanos:
- Usa un tenedor resistente para moler los plátanos en un bowl grande. Está bien dejar algunos grumos, así el pan queda más jugoso.
- Calienta el Horno:
- Prende el horno a ciento setenta y cinco grados Celsius. Engrasa bien tu molde o fórralo con papel para que lo puedas sacar fácil después.

La leche de coco es la estrella, no hay vuelta de hoja. Una vez mi hijo ralló coco fresco a mano en unas vacaciones y el pan salió impresionante, con esos trocitos de coco que se notaban en cada mordida.
Trucos para Guardar
Deja que el pan se enfríe por completo antes de guardarlo; así no se pone chicloso. Envuélvelo en plástico o guárdalo en un táper con cierre. Aguanta bien sobre la mesa dos días, pero si lo quieres tener más tiempo, mételo al refri y te dura hasta cinco días. Si lo cortas antes y lo congelas con separadores de papel, puedes sacar una rebanada cuando quieras.
Cambios de Ingredientes
Si no tienes leche de coco, con leche normal o cualquier bebida vegetal espesa te va a salir igual de rico. Si no hay piña fresca, la de lata funciona también; nada más recuerda escurrirla bien para no añadir líquido de más. ¿Quieres que salga más ligero? Usa mitad de harina de trigo integral blanca. Se puede cambiar huevo por “huevo” de linaza, pero queda un poco menos esponjoso.
Ideas Para Servir
Solo, este pan está espectacular, pero con un toque de yogur de vainilla o mantequilla salada queda aún mejor. Prueba ponerle más piña en rodajas o coco tostado después de hornearlo para lucirte. Si lo calientas un poco y le pones una bola de helado de coco con un chorrito de miel, ya tienes un postre de lujo.

Un Poco de Historia
El pan de plátano se volvió famoso en Estados Unidos en los años 30 porque todo el mundo quería aprovechar los plátanos maduros y hornear en casa. Al sumarle coco y piña, se transforma en una delicia con sabor caribeño o hawaiano que transmite alegría y dulzura en cada mordida.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué tan maduros deben estar los plátanos?
Para que salga bien dulce y con mucho sabor, usa plátanos bien maduros, esos que ya tienen muchas manchas marrones. Entre más maduros, mejor quedan.
- → ¿Puedo usar piña enlatada en vez de fresca?
¡Claro! Sirve la piña fresca o la enlatada, solo que si usas la de lata, escúrrela muy bien para que el pan no quede aguado.
- → ¿Es necesario poner coco rallado?
El coco rallado le da más sabor y textura, pero si no tienes, usa solo la leche de coco y también sale bueno con ese toque tropical.
- → ¿Cómo se disfruta más este pan?
Rebanadas tibias, tostadas con mantequilla, o con fruta fresca al lado. Queda genial en el desayuno o para terminar la comida.
- → ¿Puedo guardar el pan en el congelador?
¡Sí puedes! Espera a que se enfríe, envuélvelo bien y mételo al congelador hasta por tres meses. Al día siguiente, sácalo para que se descongele y listo.