
Los cubos de queso fritos con doble capa son ese antojo que alegra cualquier reunión, noche de pelis o cuando sólo quieres saborear queso derretido envuelto en costra crujiente. Estos bocaditos dorados me recuerdan directo a las fiestas familiares donde el platón desaparecía en un abrir y cerrar de ojos.
La primera vez que los preparé fue para una noche de juegos y aún mis amigos los piden. En serio, te va a sorprender lo fáciles y populares que son.
Ingredientes Increíbles
- Mozzarella en cubos: el queso es la estrella, busca mozzarella entera para máximo estirón
- Harina común: ayuda a pegar el empanizado, la fresca hace que el rebozado quede perfecto
- Panko: ultra crocante, si tienes japonés queda aún mejor
- Polvo de ajo: le da ese fondo sabroso que resalta el queso
- Sal: esencial para realzar todos los sabores, no la omitas
- Pimienta negra: un picor suave, recién molida cambia todo
- Huevos grandes: hacen que la costra se ligue bien, usa los más frescos
- Leche: suaviza el huevo, ayuda a que la capa se adhiera súper bien
- Aceite vegetal o canola: fritura segura por su alto punto de humo, usa aceite nuevo para mejor sabor
- Mayonesa: da esa textura sedosa al dip, mejor si es entera
- Crema ácida: toque ácido y cremoso, busca una que sea espesa y de calidad
- Perejil fresco: pone el toque de frescura, tanto en el dip como de decoración
- Jugo de limón fresco: un guiño cítrico en el dip, exprímelo al momento
- Ajo fresco: un golpecito fuerte en el dip, pícalo finito para que no encuentres pedazos grandes
- Salsa marinara: infalible para acompañar, usa tu marca favorita o una casera bien condimentada
- Parmesano rallado opcional: sube el sabor al máximo al final, que sea recién rallado si puedes
Súper Guía Paso a Paso
- Organizá tu estación de empanizado:
- Mezclá la harina, el panko, pimienta, sal y polvo de ajo en un plato grande para repartir el sabor. En otro tazón batí los huevos con leche hasta que no queden grumos. Así podés empanizar los cubos sin ensuciar todo.
- Empanizá los cubos de queso:
- Pasa cada trozo de queso por el huevo batido para cubrir bien. Luego rebozalo con la mezcla de panko y harina, apretando suave para que se pegue bien. Repetí este proceso una segunda vez para darle la doble capa crujiente.
- Congelá para fijar:
- Poné los cubos armados sobre papel manteca y llévalos al congelador 15 a 20 minutos. Eso evita que el queso se escape en la fritura y asegura el corazón derretido.
- Prepará el dip cremoso:
- En lo que el queso se enfría, mezclá mayonesa, crema, ajo picado, perejil y jugo de limón en un bol pequeño. Salpimentá a gusto, revolvé bien y guardá en la heladera para que tome sabor.
- Alistá la fritura:
- Llená una olla o sartén gruesa con unos cinco centímetros de aceite y calentá a fuego medio hasta llegar a 175°C. Tirando un pedacito de pan ves si burbujea y dora en medio minuto, ya está listo. De paso, calentá un poquito la marinara para acompañar
- Freílos a dorado perfecto:
- Agregá los cubos de a tandas para que el aceite no pierda temperatura. Cociná dos o tres minutos, dándoles vuelta para dorar todos los lados. Ojo que no se quemen.
- Escurrí y dale el toque final:
- Poné los cubitos fritos sobre papel de cocina para que larguen el aceite extra. Si querés, echales una pizca de sal mientras están calientes para más sabor.
- Sacá y decorá:
- Llevalos rápido a una fuente cuando siguen calentitos. Poné los dips al costado y coroná con un poco de perejil picado o parmesano, si te animás. Disfrutalos enseguida y mirá ese estirón de queso increíble.

Esto me recuerda las fiestas de mi abuela: el plato volaba y sólo quedaban risas. Lo mejor es el crujido con el panko y el queso tan derretido adentro, es puro placer.
Tips de Almacenaje
Lo ideal es comerlos recién hechos, pero si te sobra alguno, dejalos enfriar y guardalos bien tapados en la heladera. Para recuperar el crunch, calentá en horno o air fryer, no en microondas porque se ablandan. Dos días están bien, pero nada le gana al primer mordisco crunch del día.
Intercambio de Ingredientes
¿No hay panko? Las migas de pan común sirven, aunque no quedan tan crocantes. Si buscas más sabor, usá Monterey Jack o pepper jack y quedan con chispa. Para un dip más liviano, reemplazá la crema y mayo por yogur griego natural. Sin huevo: probá con una mezcla de agua y maicena para ligar.
Ideas para Servir
Poné estos bocaditos en el centro acompañados de dips y mirá cómo desaparecen. Van de diez con ensalada verde para no pasarte de pesado o con una bebida burbujeante para equilibrar. Si es una picada, sumá aceitunas o pepinillos crocantes.

Dato Cultural
Las barritas de mozzarella se hicieron famosas en bares y boliches yanquis, pero estos cubos dobles le ponen un giro divertido para casa. Eso de empanizar dos veces viene de las mejores técnicas fritas del mundo y el dip cremoso une todo con onda nostálgica.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Cómo quedan los cubos bien crujientes?
Rebozar dos veces las piezas de mozzarella con huevo y una mezcla de harina con panko hace que la capa quede gruesa y súper crujiente. También va genial congelar los cubos antes de freírlos, así no se derriten de más.
- → ¿Por qué hay que congelarlos antes?
Mantenerlos en el congelador ayuda a que el queso no pierda la forma cuando lo fríes, así la cubierta queda doradita y crujiente, y el interior se mantiene suave y fundente sin salirse.
- → ¿Qué aceites son buenos para freír queso?
El aceite vegetal o de canola funciona muy bien porque aguantan mucha temperatura y casi no tienen sabor, así la parte de fuera queda parejita y dorada sin que el gusto del queso cambie.
- → ¿Puedo usar otro queso que no sea mozzarella?
La mozzarella es la clásica por lo elástica, pero puedes probar con quesos semi-duros como cheddar o Monterey Jack. Cambia un poco la textura al derretirse, pero funcionan bien.
- → ¿Cómo se sirven los cubos de queso frito?
Sírvelos calientes, directo del sartén, con salsa cremosa y marinara aparte. Un toque de perejil picado o parmesano rallado por encima les da mucho sabor y se ven lindos.