
Esta ensalada cremosa de frutas con malvaviscos ha sido un elemento básico en las reuniones de mi familia durante generaciones. La mezcla de frutas dulces, malvaviscos suaves y aderezo ligeramente ácido crea un postre nostálgico que trae recuerdos de picnics veraniegos y celebraciones festivas.
La primera vez que la llevé a una comida compartida en la escuela de mi hija estaba con poco tiempo. Gustó tanto a niños y padres que ahora me piden específicamente que la lleve a cada evento comunitario.
Ingredientes
- Mandarinas: aportan un brillante sabor cítrico y un hermoso contraste de color
- Trocitos de piña: ofrecen dulzura tropical y una textura agradable
- Cóctel de frutas: añade variedad con cerezas, melocotones y peras en una sola lata
- Uvas frescas partidas: contribuyen con un estallido jugoso y un elemento fresco
- Nueces picadas: traen un maravilloso crujido pero pueden omitirse para alergias
- Mini malvaviscos: se vuelven mágicamente suaves y esponjosos después de enfriar
- Crema agria: proporciona el perfecto equilibrio ácido a la fruta dulce
- Cobertura batida congelada: aligera el aderezo para una consistencia como de nube
Instrucciones paso a paso
- Mezcla las frutas:
- Vacía todas las frutas enlatadas escurridas en un recipiente grande. Asegúrate de escurrirlas bien para evitar exceso de líquido. Agrega las uvas frescas partidas y mezcla todo con cuidado para crear una colorida combinación de frutas.
- Añade elementos secos:
- Esparce los mini malvaviscos sobre la mezcla de frutas. Si usas nueces, distribúyelas por todo el recipiente. Los malvaviscos empezarán a absorber los jugos de la fruta mientras reposan, creando una increíble transformación de textura.
- Crea el aderezo cremoso:
- En otro recipiente combina la crema agria y la cobertura batida descongelada. Únelos suavemente con una espátula de goma. Evita mezclar vigorosamente para no desinflar la cobertura batida. El aderezo debe quedar suave y esponjoso.
- Combina y enfría:
- Vierte el aderezo cremoso sobre la mezcla de frutas y malvaviscos. Usa movimientos envolventes para incorporar todo con delicadeza, asegurando que la fruta quede uniformemente cubierta sin aplastarla. Tapa el recipiente con film transparente y refrigera al menos 4 horas, pero preferiblemente toda la noche.

Los mini malvaviscos son realmente el ingrediente mágico en esta receta. Cuando era pequeña, mi abuela me dejaba añadir malvaviscos de colores extra y ver cómo se transformaban de pequeñas almohadas firmes a bocados suaves que se deshacen en la boca era casi tan placentero como comer la ensalada terminada.
Hazla a tu manera
Esta ensalada de frutas permite adaptaciones creativas según tus preferencias o lo que tengas a mano. Prueba a añadir manzanas en cubitos para un crujido extra, aunque pueden oscurecerse ligeramente con el tiempo. Las rodajas de plátano son deliciosas pero deben añadirse justo antes de servir para evitar la decoloración. Las bayas frescas como fresas en rodajas, frambuesas o arándanos son estupendas adiciones de temporada que alegran el perfil de sabor.

Consejos de conservación
La ensalada de frutas con malvaviscos se mantendrá bien en el refrigerador hasta tres días si se guarda en un recipiente hermético. La textura mejora después del primer día ya que los malvaviscos continúan ablandándose y los sabores se mezclan más completamente. Si la ensalada parece haber soltado exceso de líquido después de guardarla, simplemente escúrrelo o revuelve todo suavemente antes de servir. Esta ensalada no se congela bien debido al aderezo cremoso que se separaría al descongelar.
Sugerencias para servir
Este plato versátil funciona de maravilla tanto como guarnición o como postre. Sírvelo en recipientes de cristal transparente para mostrar las coloridas capas de frutas y malvaviscos. Para una presentación más elegante, sirve porciones en copas individuales y decora con hojas de menta fresca o una ligera espolvoreda de canela. Durante las fiestas, prueba a servirla junto a galletas de jengibre o de mantequilla para un toque festivo. La textura fresca y cremosa resulta especialmente refrescante después de barbacoas picantes o junto a platos principales más pesados.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Puedo usar fruta fresca en vez de enlatada en esta ensalada?
Claro que sí, puedes cambiar las frutas enlatadas por frescas. Usa aproximadamente 1 taza de cada una: gajos de mandarina, trozos de piña y una mezcla de frutas similares al cóctel de frutas (como melocotones, peras y cerezas). Ten en cuenta que la fruta fresca puede soltar más jugo mientras reposa, lo que podría hacer la ensalada un poco más líquida.
- → ¿Con cuánta anticipación puedo preparar esta ensalada?
Esta ensalada es mejor prepararla al menos 4 horas antes de servir, pero se puede hacer hasta con 24 horas de antelación. El tiempo de refrigeración permite que los malvaviscos se ablanden y los sabores se mezclen bien. Guárdala tapada en el refrigerador hasta el momento de servir.
- → ¿Puedo reemplazar la crema agria con otro ingrediente?
Sí, puedes cambiar la crema agria por yogur griego para un sabor más ácido y proteína extra. El yogur de vainilla es otra opción para un gusto más dulce. También podrías usar queso crema (suavizado y un poco diluido) para una textura más rica.
- → ¿Qué puedo usar en lugar de nueces para alguien con alergias?
Para alguien con alergias a las nueces, simplemente puedes omitirlas ya que son opcionales. Para lograr un crujido similar, prueba con coco tostado en hojuelas, semillas de girasol (si son seguras) o incluso un poco de granola. También puedes añadir más malvaviscos o arándanos secos para darle una textura agradable.
- → ¿Cuánto tiempo se conserva esta ensalada en el refrigerador?
Las sobras de esta ensalada se mantienen bien en el refrigerador durante 3-4 días si las guardas en un recipiente hermético. La textura de los malvaviscos seguirá ablandándose con el tiempo. Revuelve suavemente antes de servir las sobras para redistribuir el aderezo cremoso.
- → ¿Puedo congelar esta ensalada de frutas con malvaviscos?
No te recomiendo congelarla porque la textura cambiará mucho al descongelarla. Las frutas se volverán pastosas y el aderezo cremoso podría separarse. Este plato es mejor disfrutarlo fresco o durante los primeros días tras prepararlo, siempre conservado en el refrigerador.