01 -
Saca del horno con cuidado. Si quieres, ponles más mantequilla de ajo encima y agrega perejil fresco. Espera un poco a que enfríen antes de comer.
02 -
Deja que se cocinen de 13 a 15 minutos en el horno precalentado. Sácalos cuando veas que están dorados y el queso burbujeando.
03 -
Combina la mantequilla derretida con el ajo en polvo y dale una buena pasada al panecillo por arriba con un pincel. Si te animas, ponle semillas de sésamo por encima.
04 -
Pon la mezcla de carne sobre cada pedazo de masa. Échale queso por encima. Enróllalos apretando bien y deja la unión tocando la charola.
05 -
Extiende la masa de panecillo y sepárala en triángulos, o si usas masa para pizza, córtala en 8 cuadros.
06 -
Mete el ajo, la sal, la pimienta, la mostaza amarilla y el kétchup. Cocina dos minutos más y apaga el fuego.
07 -
En un sartén mediano, sofríe la cebolla y la carne hasta que pierda el color rosado. Retira el exceso de grasa.
08 -
Pon el horno a calentar a 190 °C. Forra una charola con papel para hornear.