01 -
Deja reposar el rigatoni al horno unos 5 minutos antes de disfrutarlo calientito.
02 -
Pon el parmesano encima, cubriendo todo. Mete sin tapar al horno unos 20-25 minutos, hasta que el queso burbujee y se vea dorado.
03 -
Coloca la pasta que sobró encima. Luego reparte el resto de la ricotta y la mozzarella sin dejar huecos.
04 -
Vierte la mitad de la mezcla de pasta en la fuente, distribuye en porciones la ricotta por encima y echa la mitad de la mozzarella.
05 -
Junta en un bol grande el rigatoni cocido, la salsa marinara, las espinacas salteadas, el ajo en polvo, el orégano, sal y pimienta. Integra bien todo.
06 -
Enciende el horno a 190°C y engrasa con un poco de aceite una fuente de 23×33 cm.