pasta pollo tomate cremosa (Impresión)

Pollo tierno, linguini y salsa cremosa de tomate con parmesano para un plato principal lleno de sabor a hierbas frescas y calidez.

# Ingredientes:

→ Salsa

01 - 5 ml de mostaza en polvo
02 - 2.5 ml de albahaca seca
03 - 2.5 ml de orégano seco
04 - 5 ml de polvo de cebolla
05 - 5 ml de salsa picante
06 - 10 ml de miel
07 - 175 ml de caldo de pollo
08 - 295 ml de mitad y mitad

→ Pollo y Pasta

09 - 225 g de linguine
10 - 66 g de queso parmesano rallado
11 - 45 g de pasta de tomate
12 - 3 dientes de ajo picados
13 - 42 g de mantequilla sin sal
14 - 120 ml de vino blanco seco
15 - 15–30 ml de aceite de oliva
16 - 24 g de harina de trigo común
17 - Pimienta negra al gusto
18 - Sal a gusto
19 - 10 ml de condimento italiano
20 - 450 g de pechugas de pollo sin hueso y sin piel

# Instrucciones:

01 - Mete la pasta escurrida y las tiras de pollo cocido en la salsa. Revuelve bien para que todo quede bañado y caliente. Si hace falta, ponle más sal y sirve sin esperar.
02 - Vierte el parmesano rallado poco a poco mientras revuelves para que todo quede suave. Hazlo con calma.
03 - Echa la mezcla de salsa que antes preparaste al sartén de a poco, mezclando sin parar. Cuando empiece a hervir suave, baja el fuego. Mientras, hierve el linguine hasta que casi esté listo, escúrrelo bien.
04 - Pon la pasta de tomate en el sartén y mézclalo todo hasta que no veas grumos.
05 - Echa el vino blanco, la mantequilla y el ajo picado al mismo sartén a fuego medio. Raspa el fondo para sacar lo doradito y deja que hierva hasta que el líquido se reduzca a la mitad, unos 4 minutos más o menos.
06 - Pon mucha agua con sal en una olla grande y caliéntala hasta que hierva fuerte.
07 - Calienta aceite de oliva en un sartén hondo (unos 30 cm) a fuego medio alto. Fríe los filetes de pollo por tandas 4–5 minutos de cada lado hasta que estén dorados. Sácalos y déjalos reposar 10 minutos antes de cortarlos en tiras.
08 - Abre las pechugas cortándolas a lo largo para que queden filetes. Cúbrelos con film y aplánalos con un mazo hasta que tengan 1.25 cm de grosor. Sécalos con papel, échales sal, pimienta y condimento italiano por ambos lados, y pásalos por harina.
09 - Pon mitad y mitad, caldo de pollo, miel, salsa picante, polvo de cebolla, orégano, albahaca y mostaza en polvo en una jarra grande. Bate todo hasta que esté bien integrado y déjalo cerca.

# Notas:

01 - Ralla el parmesano justo antes de usarlo y no subas mucho el fuego al mezclarlo para que la salsa quede sedosa y no se ponga arenosa.
02 - El Sauvignon Blanc queda genial en la salsa, pero si no quieres alcohol, el caldo de pollo funciona chido también.
03 - Si compras la pasta de tomate en tubo te ahorras desperdicio y tienes las porciones exactas.
04 - Puedes usar otro tipo de pasta o tirar lo que tengas, y si te animas añade jitomate, champiñones, albahaca o espinaca.
05 - Guarda lo que sobra en un recipiente cerrado en el refri por 3 días, o mételo al congelador y te dura 3 meses sin problema.