01 -
Ponles perejil picado si quieres y sirve de inmediato.
02 -
Mete las papas en el horno a 220°C (425°F) por 40 a 45 minutos. Recuerda darles vuelta a la mitad para que queden doradas y crujientes.
03 -
Pinta las papas aplastadas con aceite de oliva. Luego espolvorea sal, pimienta, ajo en polvo y el romero o tomillo seco.
04 -
Pon las papas en una bandeja con papel para hornear. Apriétalas suavemente con un machacador o el fondo de un vaso hasta que se aplasten sin romperse.
05 -
Vacía el agua y deja que las papas se sequen al vapor unos minutos para eliminar el exceso de humedad.
06 -
Pon a hervir una olla con agua y sal. Cocina las papas por 15 a 20 minutos hasta que estén blandas al pincharlas.
07 -
Pon el horno a calentar a 220°C (425°F) para que esté listo para hornear.