01 -
Saca los muffins del horno y deja que se enfríen sobre una rejilla antes de servirlos o guardarlos.
02 -
Reduce el horno a 175°C y sigue horneando de 15 a 20 minutos más. Checa con un palillo en el centro, si sale limpio ya están.
03 -
Mete la bandeja en el horno caliente a 220°C por 5 minutos para que queden altos en la parte de arriba.
04 -
Reparte la mezcla en los moldes preparados llenando como tres cuartos de cada espacio.
05 -
Echa las chispas de chocolate blanco vegano y revuelve con cuidado para repartirlas por toda la mezcla.
06 -
Ahora junta los ingredientes secos con los líquidos y mezcla con suavidad, solo hasta que ya no veas harina. No mezcles de más.
07 -
En otro bol grande, mezcla el Truvia, el aceite de coco blandito, el puré de plátano, el yogur vegetal, la compota de manzana y la vainilla. Que quede todo bien integrado.
08 -
Toma un bol mediano y revuelve la harina sin gluten, el polvo de hornear, el bicarbonato, la sal y el polvo de matcha o matcha collagen hasta que todo esté bien mezclado. Aparta.
09 -
Pon el horno a calentar a 220°C. Usa cápsulas para muffins en una bandeja de 12 unidades y rocía un poco de aceite de coco o aceite en spray.