01 -
Ralla las limas con un microplane y exprime el jugo con un exprimidor. Cuela el líquido para quitar las pepitas y la pulpa.
02 -
En una jarra grande bate la leche de coco junto con el agua de coco fría hasta que quede una mezcla pareja.
03 -
Agrega la ralladura de lima y si quieres, una pizca de sal para dar más sabor y frescura.
04 -
Incorpora el jugo colado poco a poco mientras sigues batiendo para que todo se una bien.
05 -
Echa la miel o el jarabe y mezcla hasta que se disuelva; ajusta lo dulce a tu gusto.
06 -
Agrega el agua filtrada fría y revuelve suavemente para que tome la textura que prefieras.
07 -
Mete cubitos de hielo y deja que repose mínimo diez minutos para que se enfríe y los sabores se mezclen bien.
08 -
Decora con las rodajas de lima, el coco tostado y las hojas de menta para que quede lindo y huela delicioso.