01 -
Sirve justo después de cocinar, así la costra estará super crujiente.
02 -
Corre a bañar pollo, mariscos o verduras en la mezcla y cocínalos en aceite caliente hasta que estén doraditos y crocantes. Hazlo poco a poco.
03 -
Pon un montón de aceite neutro en una olla o sartén profunda y espera que alcance temperatura media.
04 -
Mezcla todo lo seco con lo del huevo y el agua. Bate bien para que no quede ningún grumo.
05 -
Incorpora el agua gasificada al huevo batido y remueve para que se junte todo.
06 -
En otro bol, bate el huevo con ganas.
07 -
Revuelve juntos la harina de almendra, harina de coco, sal y polvo de hornear en un recipiente.