01 -
Disfruta de inmediato junto a un buen pan crujiente para mojar y acompañar.
02 -
Saca la sartén del fuego y echa perejil fresco por encima.
03 -
Coloca la tapa y deja que los huevos se cuezan a fuego suave de 6 a 8 minutos, o hasta que tengan el punto que más te guste.
04 -
Haz cuatro pequeños hoyos en la mezcla usando el reverso de una cuchara. Pon un huevo en cada espacio.
05 -
Baja el fuego y deja que la salsa burbujee entre 10 y 15 minutos, removiendo a veces, hasta que espese un poco.
06 -
Añade el tomate troceado con su jugo, las alubias blancas y el agua o caldo. Mezcla bien y echa sal y pimienta a tu gusto.
07 -
Echa el pimentón ahumado, el comino molido y el chile en polvo. Remueve durante un minuto para que suelten sus aromas.
08 -
Agrega el ajo picado y el pimiento rojo. Sofríe unos 3 o 4 minutos hasta que veas el pimiento más blandito.
09 -
Pon el aceite en una sartén grande a fuego medio. Echa la cebolla picada y cocina unos 5 minutos hasta que esté suave y transparente.