01 -
Pon las castañas de cajú ya remojadas con el jugo de limón, ajo, cúrcuma, levadura, chile, sal, pimienta y un poco de agua de la pasta en la licuadora. Triturá hasta lograr una salsa bien cremosa. Si está muy espesa, agregá agua de a poco hasta que quede como te gusta. Probá y ajustá sabor con más levadura, cúrcuma, sal o limón.
02 -
Llená una olla grande con agua y llevá a hervir. Echá buena sal y cociná la pasta como diga el paquete. Antes de colar, reservá 240 ml del líquido. Colá la pasta, devolvela a la olla y retirá del fuego.
03 -
Colocá los cajú crudos en un bol resistente al calor. Cubrilos con agua bien caliente y esperá unos 15–20 minutos hasta que estén blanditos. Escurrí, enjuagá y reservá aparte.
04 -
Sumale la salsa cremosa de cajú a la pasta ya colada y mezclá para que todo quede bien cubierto. Si ves que la salsa está muy espesa, andá agregando más agua de la cocción.
05 -
Serví enseguida, podés agregarle parmesano vegano si querés. Si sobra, guardalo en un recipiente cerrado en la heladera. Al recalentar, agregá un toque de leche vegetal para que siga cremoso.