
Este lujoso Pastel de Chocolate estilo Dubái combina la intensidad del chocolate con sabores exóticos de pistacho y masa kataifi para crear un postre verdaderamente espectacular. La mezcla de diferentes texturas y sabores logra un resultado impresionante que dejará maravillados hasta a los invitados más exigentes.
Creé este pastel por primera vez para la fiesta de compromiso de mi hermana cuando regresé de un viaje a Dubái. La fusión de ingredientes de Oriente Medio con el clásico pastel de queso fue tan exitosa que ahora me lo piden en todas las celebraciones familiares.
Ingredientes
- Base de galletas chocolate: Las galletas graham de chocolate forman una base chocolatosa perfecta para nuestro pastel. Busca galletas frescas que desprendan un aroma intenso al triturarlas.
- Mantequilla sin sal: Une la base y añade riqueza. La mantequilla estilo europeo funciona muy bien.
- Relleno de Kataifi con Pistacho: La masa kataifi da esa capa crujiente característica. La encontrarás en tiendas de alimentos de Oriente Medio en la sección congelados.
- Mantequilla sin sal: Ayuda a dorar el kataifi hasta que quede perfecto.
- Pasta de pistacho: Da un intenso sabor a nuez. Elige una pasta de alta calidad con color verde brillante.
- Tahini: Añade profundidad terrosa que complementa los pistachos maravillosamente.
- Mezcla de pastel de queso de pistacho: El queso crema forma nuestra base suave. La marca Philadelphia funciona muy bien.
- Azúcar granulada: Equilibra la acidez del queso crema.
- Crema agria: Aporta humedad y suaviza la textura.
- Pasta de pistacho: Infunde el pastel con sabor vibrante.
- Tahini: Realza el perfil a frutos secos.
- Huevos grandes: Dan estructura y cremosidad.
- Extracto de almendra: Intensifica los sabores a nuez.
- Extracto de vainilla: Aporta calidez y complejidad.
- Sal: Mejora todos los sabores y equilibra el dulzor.
- Ganache de chocolate: El chocolate semidulce crea el balance perfecto entre amargo y dulce. Elige un chocolate de calidad con 55-60% de cacao.
- Nata para montar: Crea un ganache sedoso al mezclarse con el chocolate.
- Cobertura: Los pistachos picados dan color, textura y atractivo visual como toque final.
Instrucciones Paso a Paso
- Prepara la base:
- Tritura las galletas graham de chocolate en el procesador hasta conseguir migas finas. La textura debe parecer arena mojada al mezclar con la mantequilla derretida. Presiona firmemente en el molde desmontable usando el fondo plano de una taza medidora. Los 10 minutos de horneado fijan la base y realzan el sabor a chocolate.
- Crea la capa de Kataifi:
- Al cocinar la masa kataifi es súper importante remover constantemente porque se quema rápido. Busca un color dorado profundo que indica que está bien tostado. La mezcla con pasta de pistacho debe quedar pegajosa pero manejable. Si está muy seca añade un poco más de mantequilla derretida.
- Haz la mezcla del pastel:
- Batir bien el queso crema es clave para una textura suave. Empieza con todos los ingredientes a temperatura ambiente para evitar grumos. Al añadir huevos, mezcla solo hasta incorporar porque batir demasiado mete aire que puede causar grietas. Raspa el bol entre cada adición.
- Ensambla y hornea:
- Presionar firmemente la capa de kataifi crea un contraste de texturas distintivo. El baño maría no es negociable para lograr esa textura cremosa perfecta sin grietas. Asegúrate que el sello de papel aluminio esté apretado para que no entre agua. El enfriamiento lento en el horno apagado evita el cambio brusco de temperatura que hace que el pastel se hunda.
- Prepara el ganache:
- Calentar la nata a exactamente 82°C asegura que el chocolate se derrita completamente sin quemarse. Deja reposar el chocolate en la nata caliente antes de batir para un resultado más suave. El ganache debe cubrir el dorso de una cuchara pero aún ser vertible.
- Ensamblaje final:
- Aplica el ganache en capas uniformes usando una espátula en ángulo de 45 grados. Trabaja rápido con el relleno de kataifi porque se endurece más rápido una vez frío. Los pistachos picados deben espolvorearse mientras la capa final de ganache aún está ligeramente pegajosa para que se adhieran bien.

Este pastel me recuerda mi primera visita a una pastelería tradicional en Dubái donde me enamoré de la combinación de pistachos y kataifi. El dueño me contó que el secreto de los buenos postres de Oriente Medio está en equilibrar el dulzor con frutos secos y texturas variadas.
Estrategia de tiempo perfecto
La belleza de esta receta está en dividirla en partes manejables. Te sugiero hacer la base y el relleno de kataifi el primer día, la mezcla del pastel y hornearlo el segundo día, y terminar con el ganache el tercer día. Este enfoque evita el cansancio en la cocina y asegura que cada componente reciba la atención adecuada.
Variaciones de ingredientes
Si no encuentras masa kataifi, puedes sustituirla con hojas de masa filo picadas finamente, mezcladas con mantequilla y tostadas hasta que queden doradas. La textura será un poco diferente pero igual de rica. Para quienes no consigan pasta de pistacho, procesa pistachos tostados sin sal con un toque de miel hasta obtener una pasta suave. Reemplaza el tahini con mantequilla de almendra si lo prefieres, aunque el perfil de sabor cambiará ligeramente.
Sugerencias para servir
Sirve este pastel con una pequeña bola de helado de cardamomo para una auténtica experiencia de Oriente Medio. Un simple espolvoreado de cacao en polvo crea una presentación elegante como alternativa a la guarnición de pistacho. Para ocasiones especiales, añade un toque de hoja de oro comestible para honrar la inspiración de Dubái. Siempre sirve las porciones a temperatura ambiente fresca en lugar de frías directamente de la nevera para la mejor experiencia de sabor.
Consejos de conservación
Este pastel se mantiene perfectamente en la nevera hasta 5 días cuando se guarda en un recipiente hermético. La capa de kataifi se ablandará un poco con el tiempo pero sigue estando deliciosa. Para conservarlo más tiempo, congela porciones individuales bien envueltas en film plástico y papel aluminio hasta por 3 meses. Descongela durante la noche en la nevera antes de llevar a temperatura ambiente fresca para servir.

Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Qué es la masa kataifi y dónde puedo encontrarla?
La masa kataifi es un producto de repostería del Medio Oriente hecho de finas hebras de masa filo que parece pasta de cabello de ángel. Puedes hallarla en tiendas de alimentos del Medio Oriente, tiendas especializadas o en la sección internacional de supermercados bien surtidos. Normalmente se vende congelada y hay que descongelarla antes de usarla.
- → ¿Puedo hacer esta tarta sin baño maría?
Aunque puedes hacer la tarta sin baño maría, no te lo recomiendo. El baño maría proporciona un calor suave y uniforme que ayuda a evitar grietas en la superficie y asegura una textura cremosa en toda la tarta. Sin él, la tarta podría agrietarse y quedar más seca por los bordes.
- → ¿Con qué puedo reemplazar la pasta de pistacho?
Si no encuentras pasta de pistacho, puedes hacerla tú mismo procesando pistachos tostados sin sal en un procesador de alimentos con un poco de aceite neutro hasta que quede suave. Como alternativa, podrías usar mantequilla de almendras o pasta de avellanas, aunque esto cambiará el sabor final del postre.
- → ¿Cuánto tiempo se conserva esta tarta?
Esta tarta puede guardarse en la nevera hasta 5 días si está bien tapada. También puedes congelarla hasta por 2 meses - envuelve las porciones individuales o la tarta entera con film transparente y luego papel aluminio antes de congelar. Descongela durante la noche en la nevera antes de servir.
- → ¿Puedo preparar algunos componentes con antelación?
Sí, varios componentes pueden prepararse con anticipación. La base de chocolate puede hacerse 1-2 días antes y refrigerarse. El relleno de kataifi puede prepararse hasta 3 días antes y mantenerlo refrigerado. La tarta terminada en realidad se beneficia de la refrigeración, ya que los sabores se desarrollan y se mezclan, así que hacerla un día antes de servir es ideal.
- → ¿Cuál es la mejor manera de cortar porciones limpias de esta tarta?
Para cortes limpios, moja un cuchillo afilado en agua caliente, sécalo y corta. Repite este proceso entre cada porción. El cuchillo caliente se deslizará más fácilmente por el ganache y el relleno, creando porciones ordenadas. También puedes refrigerar la tarta hasta que esté muy firme antes de cortarla para conseguir cortes aún más limpios.