
Estos sándwiches fritos de tarta de queso con fresas han salvado más de un desayuno en mi casa. Son súper rápidos y dejan a todos sorprendidos. Imagina pan doradito y caliente con un relleno sedoso de tarta de queso y trozos de fresa fresca. El contraste lo hace genial: el gusto cremoso adentro y el toque crujiente como tostada francesa afuera. Los tienes listos en unos quince minutos.
Los preparé al apuro una vez para un antojo del fin de semana y ahora no hay cumpleaños o noche de películas donde no me los pidan.
Sabrosos Ingredientes
- Queso crema: Es la base suave del relleno Píllalo entero y déjalo que se ponga blandito en la mesa antes de mezclar
- Azúcar blanca: Da el toque dulce justo mejor si usas azúcar fina porque se mezcla sin grumos con el queso
- Esencia de vainilla: Redondea todos los sabores Siempre que puedas usa vainilla natural y no la falsa
- Fresas: La estrella del plato Frescas sueltan jugo aunque las congeladas igual sirven si las escurres bien
- Mermelada de fresa: Potencia el sabor frutal Dulce y pegajosa elige una con trocitos de fruta real para mayor textura
- Pan de molde blanco: Bien blandito es ideal para envolver el relleno y dorarse bonito quítale las cortezas si buscas un look más de panadería
- Huevos: Son lo que ayuda a que el rebozado se adhiera y de ese acabado de tostada francesa
- Leche: Hace que el huevo quede más líquido y fácil de empapar Añade leche entera si quieres más sabor
- Canela en polvo: Si quieres un sabor cálido y suave mejor si usas un bote fresquito
- Mantequilla: Es lo que necesitas para freírlos y lograr ese color dorado apetitoso Mejor sin sal y no te quedes corto
- Migas de galleta graham: Opcional pero genial para darle textura al borde Hazlas en casa triturando galletas si puedes
- Azúcar glass: Perfecta para espolvorear y darle ese toque de pastelería Mejor si la pasas por un colador
- Rodajas de fresa y sirope de arce o miel: Le dan más onda como decoración y suman sabor Elige fresas firmes y maduritas
Sencillos Pasos a Seguir
- Prepara el relleno de queso crema
- Mete el queso crema, el azúcar y la vainilla en un bol. Bate todo con unas varillas o batidora hasta que esté bien suave y ya no sientas gránulos de azúcar. Incorpora las fresas cortadas y la mermelada. Mezcla suavecito solo hasta que las fresas estén bien repartidas para que no se deshagan.
- Monta los sándwiches
- Pon cuatro rebanadas de pan sin corteza sobre la mesa. Unta cada una con bastante relleno de queso llegando hasta los bordes. Tápalas con otra rebanada y presiona todo alrededor para que el relleno no se salga.
- Haz la mezcla de huevo
- Bate huevos y leche en un plato hondo. Si quieres, échale canela. Mezcla bien hasta que todo esté parejito. Sumerge cada sándwich en la mezcla y deja escurrir el sobrante. Si buscas que los bordes sean crujientes, pásalos luego por las migas de galleta.
- Dóralos en la sartén
- Calienta mantequilla en una sartén antiadherente a fuego medio Espera a que se derrita y empieza a burbujear. Echa un trocito de pan para comprobar el calor: si chisporrotea, está listo. Coloca los sándwiches y deja que se doren sin moverlos dos o tres minutos por un lado. Dales la vuelta con cuidado para dorar el otro lado igual. Si ves que se doran demasiado rápido baja un poco el fuego.
- Escurre y sirve
- Pon los sándwiches calientes sobre papel de cocina para que absorba la mantequilla extra. Deja que se enfríen un poco. Córtalos diagonalmente para que se vean bonitos. Espolvorea con azúcar glass y ponles más fresas y chorrito de sirope o miel para un toque aún más rico.

Me encanta el relleno. Sobre todo cuando muerdo y sale un trozo de fresa calentito. A mis hijos les divierte cubrirlos con tanto azúcar glass que parece que está nevando. Siempre hay muchas risas en la mesa cuando los sirvo.
Cómo Guardarlos
Lo mejor es comer estos sándwiches fritos de fresa y queso justo recién hechos porque el pan sigue crujiente. Si te sobra alguno, espera a que enfríen y guárdalos bien envueltos en papel de aluminio o en un recipiente con tapa. Caliéntalos en sartén a fuego bajo para que no se ablanden. No uses microondas porque el pan se pone chicloso.
Sustitutos de Ingredientes
Puedes usar pan de trigo integral o brioche si quieres que queden más contundentes o sabrosos. Si no tienes fresas te valen frambuesas o arándanos aunque cambian un poco la textura. Para un toque ácido, puedes mezclar un poco de ralladura de limón al queso crema. El queso crema vegano y la leche vegetal también quedan bien si lo necesitas.

Ideas para Servir
Son geniales en un brunch cortados en cuatro para sacar en fiestas, o al lado de nata montada y helado de vainilla si quieres que parezcan un súper postre. Si es una reunión de adultos, una pizca de sal gruesa por encima al sacarlos de la sartén realza todos los sabores.
Contexto Cultural
El cheesecake frito empezó a verse mucho en ferias de Estados Unidos, pero la versión casera se parece más a una tostada francesa rellena. Es como un antojo fácil inspirado en la tarta de queso con fresas, perfecta para cualquier edad.
Preguntas y respuestas sobre la receta
- → ¿Puedo usar fresas congeladas?
Sí, solo descongélalas y sécalas bien con papel antes de mezclarlas para que no quede aguado el relleno.
- → ¿Cómo evito que se salga el relleno?
Cierra bien los bordes del sandwich y presiónalos un poco antes de mojar en huevo, así nada se escapa al freír.
- → ¿Se pueden preparar antes?
Puedes armar y dejar los sandwiches en la nevera hasta el día siguiente. Fríelos justo antes de comer para que sigan crocantes.
- → ¿Qué tipo de pan es mejor?
El pan blanco sin corteza es suave, se dora rápido y sostiene bien el relleno.
- → ¿Qué le puedo poner encima?
Prueba con azúcar glass, un chorrito de miel de maple o miel, y más fresas frescas en rodajas.