01 -
En un bol apto para microondas, mezcla la leche, la harina de arroz glutinoso, el azúcar y la maicena. Asegúrate de integrar todo perfectamente. Vierte el aceite vegetal y remueve bien. Tamiza la mezcla para que quede muy suave. Cubre el recipiente con plástico de cocina apto para microondas y haz varios agujeritos para que salga el vapor.
02 -
Pon la mezcla en el microondas a máxima potencia durante 3 minutos. Detente, revuelve bien y sigue cocinando en intervalos de 1 minuto hasta que el mochi se vuelva translúcido y no queden partes crudas. Si prefieres, puedes cocinarlo al vapor sobre agua hirviendo durante 20-30 minutos y comprobar su cocción. Cuando esté listo, se verá brillante y se despegará fácilmente de los bordes del recipiente.
03 -
Usa guantes para manejar el mochi caliente con seguridad. Amasa suavemente la masa para que quede homogénea. Haz bolitas del tamaño de una nuez. Al final, rueda cada bolita por tu cubierta favorita: cacao, leche en polvo o matcha.
04 -
Disfruta las bolitas tal cual, o si quieres algo diferente, acompáñalas con salsas como crema agria o ranch para un contraste único.