01 -
Pon a calentar una sartén antiadherente a fuego medio hasta que esté lista.
02 -
Coloca dos rebanadas de pan con la mantequilla hacia abajo en la sartén.
03 -
Agrega el queso cheddar, luego el mozzarella y finalmente los pepinillos por encima. Si quieres, unta mostaza Dijon sobre el queso.
04 -
Unta mantequilla en un lado de cada rebanada de sourdough.
05 -
Pon las otras dos rebanadas encima con la mantequilla hacia arriba.
06 -
Cocina hasta que se dore la parte de abajo. Dale la vuelta y sigue hasta que el queso se derrita y el pan esté tostado y dorado por ambos lados.
07 -
Saca del fuego, corta los sándwiches por la mitad y sirve calientitos.